Categorías
Noticias

Cultivando un México Mejor con un manejo eficiente del agua

Productor de cebada participante en el proyecto Cultivando un México Mejor. (Foto: CIMMYT)
Productor de cebada participante en el proyecto Cultivando un México Mejor. (Foto: CIMMYT)

“La agricultura de conservación y el manejo eficiente del agua pueden ayudar a los productores agrícolas a reducir su consumo de agua. Estas prácticas se están implementando en parcelas de productores del Bajío con el apoyo del proyecto Cultivando un México Mejor, que impulsan HEINEKEN México y CIMMYT”, comenta el equipo técnico de este proyecto en Guanajuato.

La agricultura de conservación es un conjunto de prácticas que ayudan a conservar el suelo y el agua. “Estas prácticas incluyen el uso de coberturas vegetales, la rotación de cultivos y la labranza mínima. Las coberturas vegetales ayudan a proteger el suelo de la erosión y a retener la humedad. La rotación de cultivos ayuda a mantener la fertilidad del suelo. La labranza mínima ayuda a conservar la estructura del suelo y a reducir la pérdida de agua”, detallan.

Por su parte, “el manejo eficiente del agua es un conjunto de prácticas que ayudan a utilizar este recurso de mejor manera; incluyen la medición del consumo de agua, la optimización de los sistemas de riego y la selección de cultivos adecuados para las condiciones climáticas”.

Cultivando un México Mejor es una iniciativa diseñada para garantizar la gestión sostenible del agua en el cultivo de cebada, donde “la medición del consumo de agua ayuda a identificar las áreas donde se puede mejorar la eficiencia y la optimización de los sistemas de riego ayuda a asegurar que el agua se aplique de manera uniforme y eficiente”.

El proyecto conjunto de HEINEKEN México y CIMMYT contempla un importante trabajo de capacitación dirigido a los productores. Al respecto, la coordinación de uso eficiente del agua del Hub Bajío de CIMMYT comenta: “los productores están aprendiendo sobre la importancia de cuidar el agua y cómo optimizar sus sistemas de riego. El acompañamiento de los técnicos está siendo muy valioso para ellos, ya que les está brindando las herramientas y conocimientos necesarios para implementar estas prácticas de manera exitosa en sus parcelas”.

“Estas prácticas son importantes para la sostenibilidad de la agricultura en el Bajío. El agua es un recurso limitado, y es importante que los productores agrícolas encuentren formas de usarla de manera más eficiente. La agricultura de conservación y el manejo eficiente del agua son dos prácticas que pueden ayudar a los productores agrícolas a reducir su consumo de agua y proteger este recurso vital”, concluye el Hub Bajío de CIMMYT.

Categorías
Noticias

Uso eficiente de agua en Sonora

Trigo cultivado con agricultura de conservación en Sonora, México. (Foto: Hub Pacífico Norte-CIMMYT)
Trigo cultivado con agricultura de conservación en Sonora, México. (Foto: Hub Pacífico Norte-CIMMYT)

México enfrenta desafíos significativos en términos de disponibilidad y calidad del agua. Además, de acuerdo con el Índice de Estrés Hídrico Global, México se encuentra entre los países con mayor estrés hídrico (cuando la demanda de una región excede la cantidad de agua disponible durante un período de tiempo específico), lo que indica presiones significativas sobre los recursos hídricos disponibles.

El uso del agua en México es diverso, abarcando desde el consumo humano hasta la agricultura y la industria. De acuerdo con CONAGUA, el 76% del agua se destina a la agricultura, el 13% a usos urbanos y el 11% a la industria.

Por lo anterior, es fundamental que los agricultores conozcan y adopten prácticas que les permitan aprovechar, cuidar y optimizar el agua disponible, particularmente en un contexto de variabilidad climática, donde las lluvias se vuelven erráticas, los periodos de sequía se prolongan y, en general, hay incertidumbre sobre si habrá agua o no para cultivar.

Para apoyar a los agricultores en esta tarea, CIMMYT y sus colaboradores han establecido plataformas de investigación donde se ponen a prueba distintas prácticas que pueden ser de utilidad en el campo. En la plataforma de investigación Cajeme II, en Sonora, por ejemplo, entre los temas que se estudian está el efecto de riego reducido.

Desde el ciclo otoño-invierno de 2013 en que se ha establecido y documentado la práctica, señalan los responsables de la plataforma, “el cuarto riego de auxilio ha aumentado el rendimiento del trigo en una tonelada por hectárea (t/ha) empleando camas permanentes (con rastrojo en la superficie) y 0.3 t/ha en labranza convencional”, lo que confirma los beneficios de la agricultura de conservación para la optimización del uso del agua.

En la plataforma de investigación Navojoa, el efecto del riego reducido se ha monitoreado desde el ciclo otoño-invierno 2011-12 (reportándose que los mejores rendimientos con un riego antes de la siembra y dos o tres riegos de auxilio, han sido con camas permanentes), sumando evidencia de que el uso de camas permanentes contribuye notablemente al cuidado del recurso hídrico.

Evidencia como la generada en estas plataformas sonorenses confirman entonces la pertinencia de distintas prácticas de agricultura de conservación para el cuidado del agua. Por esta razón, este enfoque para el uso eficiente del recurso hídrico forma parte del Menú de tecnologías validadas – Trigo de riego en Sonora. Te invitamos a consultarlo completo y a seguir el hashtag #MenúTecnológicoSustentable en nuestras redes sociales para más información sobre tecnologías validadas.

Categorías
Noticias

Avances para aumentar la eficiencia del riego en Zacatecas

Parcelas de productores zacatecanos que participan en Aguas Firmes. (Foto: Aguas Firmes)
Parcelas de productores zacatecanos que participan en Aguas Firmes. (Foto: Aguas Firmes)

Aproximadamente el 70 % de todas las aguas extraídas de los ríos, lagos y acuíferos se utilizan para el riego y, aunque la agricultura de regadío representa solo el 20 % del total de la superficie cultivada, permite producir el 40 % de alimentos en todo el mundo (Banco Mundial, 2023). Esto significa que, en promedio, la agricultura de regadío es al menos el doble de productiva por unidad de tierra que la agricultura de temporal.

Si bien el riego permite una mayor intensificación de la producción, enfrenta numerosos retos. En México, por ejemplo, se estima que entre el 40 y el 50 % del agua destinada al riego se desperdicia debido a que los canales de riego son de tierra (agua.org.mx) y, al recorrer grandes distancias, el agua se evapora o se filtra. Además, existen diversas problemática en torno a los sistemas de administración y gestión del agua, prevalecen calendarios de riego inadecuados, muchos agricultores carecen de elementos para hacer un riego más eficiente, entre otras limitaciones.

El uso de tecnologías para optimizar el riego es una opción para saber cuándo y cuánto regar. Los sensores de humedad, por ejemplo, son instrumentos que permiten calcular la cantidad de agua en el suelo y determinar el volumen del líquido almacenado después de un riego o una lluvia, así como calcular el agua que consume el cultivo y determinar la eficiencia del riego, ya que tanto “regar de más” como “regar de menos”, tiene consecuencias tanto para los cultivos, la calidad del suelo y la rentabilidad de la producción.

“En ciclos pasados se hicieron algunos ensayos con una empresa para instalar sensores de humedad y así saber específicamente si se requiere aplicar agua o no. El agricultor con quien hicimos el ensayo nos dijo «oye, esta cosa se paga sola  porque comparando los riegos normales contra lo que me decía el aparato, pues ahorré bastante». Además, el monitoreo se realiza desde el celular mediante una aplicación, así que para el agricultor estuvo excelente”, comenta Julio  César González, quien forma parte del equipo técnico del proyecto Aguas Firmes en Zacatecas.

Aguas Firmes es un proyecto impulsado por Grupo Modelo junto con la Cooperación Técnica Alemana GIZ, por encargo del Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ) de Alemania, implementado por CIMMYT y diversas organizaciones. Su objetivo fundamental es mejorar la sustentabilidad hídrica de los acuíferos de Calera en Zacatecas y Apan en Hidalgo y por ello promueve la agricultura sustentable como uno de sus pilares.

En el marco de Aguas Firmes, el CIMMYT y el proveedor de sensores de humedad establecieron un acuerdo de colaboración para disponer de “20 equipos para darle el servicio a más agricultores, pero ya basados en datos duros. Es decir, en una parcela se instala el sensor y este nos va diciendo si hay una parte a la que le falta humedad. El uso de esta tecnología va a ayudar por mucho en la toma de decisiones de cuánto regar y en qué momento”, menciona Julio  César.

Optimizar el riego es fundamental para cuidar los limitados recursos hídricos que existen en Calera, cuyo acuífero, de donde procede el agua de riego de la zona, se encuentra sobreexplotado. En este sentido, cuando un agricultor “ve que ya no trasmina el agua más allá del surco”, significa que se ha comenzado a cambiar la perspectiva sobre el impacto de la agricultura en el medioambiente y ese, es también el propósito de Aguas Firmes: transformar los sistemas agroalimentarios de manera integral.

¿Quieres saber más de Aguas Firmes? Visita el sitio web para más información: https://www.aguasfirmesgrupomodelo.com/es