Categorías
Blogs

Salir de la pobreza o seguir siendo pobre

Farmer Dhansa Bhandari (left) sows maize seed while Bikram Daugi (right) ploughs with his oxen in Ramghat, Surkhet, Nepal. (Photo: P. Lowe/CIMMYT)
La agricultora Dhansa Bhandari (izquierda) siembra semillas de maíz mientras que Bikram Daugi (derecha) ara con sus bueyes en Ramghat, Surkhet, Nepal. (Foto: P. Lowe/CIMMYT)

Aunque el pensamiento convencional en las comunidades rurales del sur de Asia es que los hombres son los principales responsables de sacar a sus familias de la pobreza, nuestro reciente estudio demostró que la verdad es más sutil y femenina.

En nuestro nuevo artículo profundizamos en grupos focales e historias de vida en 32 comunidades agrícolas de cinco países del sur de Asia. Aunque preguntamos sobre los roles de los hombres y las mujeres, los grupos focales de ambos sexos enfatizaron a los hombres en sus respuestas, ya sea explicando cómo las familias salieron de la pobreza o por qué continuaron siendo pobres.

«Las mujeres generalmente no pueden generar un gran cambio, pero pueden ayudar a los hombres a mejorar», explica un miembro del grupo focal de hombres pobres de la comunidad de Ismashal (un seudónimo) de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa de Pakistán.

Los testimonios de los grupos focales presentaron abundantes ejemplos de la fuerte influencia de las normas de género: las reglas sociales que dictan roles y conductas diferenciales para hombres y mujeres en su sociedad. Estas normas influyeron significativamente en cómo la gente concibió los movimientos dentro y fuera de la pobreza en su comunidad y en sus propias vidas.

Según el grupo focal de mujeres del distrito de Rangpur en Bangladesh, las mujeres «no pueden trabajar fuera del hogar por temor a perder su reputación y respeto».

Sin embargo, en estas mismas comunidades, los roles productivos de hombres y mujeres demostraron ser mucho más variables en los procesos de movilidad de sus familias que los transmitidos por los grupos focales. Encontramos muchos hogares con hombres que realizaban contribuciones irregulares o muy limitadas al mantenimiento de la familia. Esto ocurre por varias razones, incluyendo la migración laboral de los hombres, la discapacidad, los conflictos y separaciones familiares, el envejecimiento y la muerte.

Además, al compartir sus historias de vida en entrevistas individuales, casi todas las mujeres testificaron sobre sus propios esfuerzos persistentes para ganarse la vida, cubrir los gastos del hogar, lidiar con las deudas y, cuando las condiciones lo permitieron, proporcionar una vida mejor para sus familias. De hecho, nuestra investigación encontró a 12 mujeres que declararon haber hecho contribuciones sustanciales para sacar a sus familias de la pobreza.

Promotoras e impulsoras

Nos sorprendió de manera particular la cantidad de mujeres «promotoras» que empleaban tecnologías y prácticas agrícolas innovadoras para expandir su producción y sus ganancias.

«En 2015, utilizando máquinas de labranza cero, comencé a cultivar maíz, obtuve un buen rendimiento y grandes ganancias», comenta una mujer de 30 años y madre de dos hijos de Matipur, Bangladesh, que sacó a su familia de la pobreza.

Otra promotora de 30 años, agricultora y madre de dos hijos de la comunidad de Thool en Nepal, apoya la diversificación y adopción de prácticas mejoradas de cultivo: “Recibí capacitación en agricultura de hortalizas. Al principio, la oficina de agricultura también proporcionó algunas semillas de hortalizas. Y comencé a cultivar verduras junto con cereales como trigo, arroz, maíz, avena. […] Aprendí a arar la tierra».

Entre las mujeres que salieron adelante, una gran mayoría acreditó a un hombre importante en su vida por dejar a un lado las costumbres locales y apoyarlas directamente para innovar en sus medios de vida agrícolas y sacar a sus familias de la pobreza.

A través de las historias de las «promotoras», las mujeres obtuvieron acceso a recursos familiares que les permitieron intensificar sus actividades de subsistencia. Por ejemplo, las tres cuartas partes de las mujeres «promotoras» hablaron de esposos o hermanos que los apoyaban para alcanzar objetivos importantes en sus vidas.

Women’s most important relationship helping them to pursue goals in life: women "movers" (on left) versus "chronic poor" (right).
La relación más importante de las mujeres ayudándolas a alcanzar objetivos en la vida: mujeres «promotoras» (a la izquierda) versus «mujeres en pobreza extrema» (derecha).

Sufia, de una comunidad en el distrito Rajshahi de Bangladesh, describe cómo superó la gran resistencia de su esposo para acceder a una parcela agrícola proporcionada por su hermano. La parcela permitió a Sufia cultivar betel y arroz con cáscara, y con esos beneficios y ganancias adicionales de las actividades ganaderas, compró más tierra y diversificó con berenjenas, chiles y calabaza. El esposo de Sufia había luchado por mantener a la familia y poco después de que Sufia comenzó a prosperar, sufrió un derrame cerebral y requirió años de tratamientos médicos antes de fallecer.

Cuando Sufia reflexiona sobre su vida, considera que la relación más importante en su vida ha sido estar con su hermano. “Gracias a él ahora puedo sostenerme”.

También estudiamos a las mujeres y familias que no salieron de la pobreza. Estas mujeres en pobreza extrema rara vez mencionaron el acceso a innovaciones o la obtención de beneficios significativos en sus medios de vida. En estas historias de vida, encontramos muchos menos testimonios sobre hombres que apoyaron financieramente a una esposa o hermana para ayudarla a alcanzar un objetivo importante.

La normativa restrictiva en gran parte del sur de Asia refleja que la capacidad de las mujeres para permitir el cambio en sus medios de vida rara vez es reconocida o alentada por la comunidad en general como una forma de prosperidad para una familia pobre. Aun así, las historias de vida de estas «promotoras» abren una ventana a las posibilidades cuando las mujeres tienen la oportunidad de asumir roles domésticos más equitativos y pueden acceder a innovaciones agrícolas.

Las mujeres promotoras y los hombres que las apoyan, brindan información sobre las vías de un cambio agrícola más equitativo. Lo que podemos aprender de estas experiencias tiene un gran potencial para programas destinados a moderar las normas de género, catalizar la innovación agrícola y desbloquear transiciones más rápidas hacia la igualdad de género y la reducción de la pobreza en la región. Sin embargo, desafiar las normas sociales puede ser arriesgado y puede provocar reacciones violentas por parte de la familia u otros miembros de la comunidad. Para abordar esto, los modelos de investigación colaborativa son prometedores. Estos enfoques involucran a investigadores, mujeres y hombres locales en acciones de aprendizaje para desarrollar la comprensión y el apoyo al cambio agrícola inclusivo. Nuestra investigación sugiere que tales intervenciones, que combinan las dimensiones sociales, institucionales y técnicas de la innovación agrícola, pueden ayudar a diversos tipos de familias a abandonar la pobreza.

Lea el estudio completo: Normas de género y dinámica de la pobreza en 32 pueblos del sur de Asia

Explore our coverage of International Women’s Day 2020.

Categorías
Videos

Luciérnagas, alimentos y el futuro: las científicas comparten inspiración tras elegir la ciencia como estilo de vida

El fitomejoramiento, la genética, las matemáticas y el desarrollo de software son campos estereotípicamente masculinos. Durante mucho tiempo, las mujeres han sido excluidas de estos campos por razones sociales, religiosas, culturales y porque «Es un club de niños, no me siento bienvenida», lo que priva al progreso científico de grandes mentes e ideas femeninas.

En el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, nos detuvimos para preguntar a cuatro científicas y líderes del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) por qué eligieron dedicarse a la ciencia. Aquí hay algunos puntos destacados llenos de inspiración.

¿Qué te hizo querer dedicarte a la ciencia?

Margaret Bath, miembro del Consejo Directivo del CIMMYT: “Me encanta la comida y me encantan las ciencias y las matemáticas, así que tuve la oportunidad de combinar […] las tres cosas que me encantan y hacer una gran carrera gracias a ellas. Creo firmemente en las matemáticas y las ciencias como un facilitador para resolver los problemas complejos que enfrenta nuestra sociedad hoy en día».

https://www.instagram.com/p/B8SFzWyg86c/

Cynthia Ortiz, investigadora del Programa de Recursos Genéticos del CIMMYT: Recuerdo un momento cuando estaba observando las luciérnagas. Mi abuelo se acercó y me dijo que si entendía por qué brillaban y le respondí que no, y recuerdo bien una frase que él me dijo: “El mundo es mucho más de lo que vemos, oímos y sentimos”. En ese momento, supe que quería entender más sobre las cosas que nos rodean».

https://www.instagram.com/p/B8T52Y7nt_r/

¿Qué es lo mejor de ser científica?

Aparna Das, Gerente Técnica del Programa Global de Maíz del CIMMYT: “La idea de utilizar información, conocimiento y tecnología para generar productos biológicos fue muy emocionante para mí. El mayor aprendizaje que he tenido en los 25 años de mi carrera como científica de fitomejoramiento […] ha sido cómo puedo usar la información, combinarla con los avances tecnológicos actuales y ofrecer algo para el futuro, que pueda abordar el problema de la crisis alimentaria mundial, que se avecina […] en un futuro cercano».

https://www.instagram.com/p/B8Zeau5neHq/

Philomin Juliana, científica de trigo en el Programa Global de Trigo del CIMMYT: “Cómo puedes usar la investigación científica para responder muchas preguntas diferentes y cómo puedes resolver […] diferentes problemas usando las matemáticas y el análisis de datos. Todas estas son preguntas clave que afectan a la humanidad hoy en día y cómo podemos diseñar sistemas futuros basados en nuestra comprensión actual de los mismos y también cómo todos estos sistemas pueden ayudarnos a hacer una diferencia en las vidas de los agricultores y las personas de escasos recursos”.

https://www.instagram.com/p/B8Z2WTfH-sh/

¿Te apasiona la ciencia y quieres que más mujeres se involucren? únete a la campaña #WhyIChoseScience del CIMMYT. ¡Saca tu teléfono, haz clic en «grabar» y comparte lo que te hizo querer convertirte en científica!

Categorías
Publicaciones

Publicaciones recientes: Explorando cómo las mujeres toman el control de las tecnologías de trigo y maíz en Bangladesh

Un nuevo estudio publicado en Canadian Journal of Development Studies muestra cómo algunas de las mujeres indígenas de Bangladesh están superando las normas sociales y los prejuicios institucionales para obtener acceso directo a las innovaciones agrícolas de maíz y trigo a través del desarrollo de organizaciones agrícolas dirigidas por mujeres, que, además, benefician a las mujeres musulmanas de bajos ingresos.

La agricultura es importante para la economía de Bangladesh y emplea a un gran porcentaje de la población masculina y femenina, como agricultores, mano de obra y encargados. Bangladesh también tiene un compromiso político positivo con la igualdad de género. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas están integrados en los planes de crecimiento nacional del país, incluido un fuerte compromiso con el Objetivo 5, Igualdad de género y el Objetivo 10, Reducir la desigualdad.

Sin embargo, este nuevo estudio muestra que los programas de innovación agrícola están dirigidos principalmente a los agricultores varones de ingresos medios. Los prejuicios institucionales entre los socios agrícolas —oficiales de extensión, organizaciones de investigación, responsables políticos, socios del sector privado y otros— pueden impedir que los pueblos indígenas y las mujeres participen en los procesos de innovación de trigo y maíz, ya que rara vez cumplen los criterios necesarios: suficiente tierra y capital social. Además, su participación en los mercados varía según su ubicación socioeconómica en la sociedad.

Basándose en los estudios de caso de GENNOVATE, los autores proporcionan información sobre cómo los estratos superpuestos de desventaja están siendo desafiados en una comunidad en el norte de Bangladesh.

Las mujeres indígenas Santal son personas activas en la agricultura en la comunidad, tanto en el campo como en la toma de decisiones, pero a menudo son marginadas por los socios agrícolas. Al movilizarse en una organización agrícola dirigida por mujeres, han proporcionado un foro para la entrega de capacitación técnica. Este proceso ha alentado a las mujeres musulmanas de bajos ingresos —que trabajan en el campo, pero también son marginadas por socios agrícolas— a unirse a la organización y beneficiarse también de la capacitación.

Las conclusiones proporcionan información sobre cómo los socios de investigación agrícola pueden trabajar para fortalecer la contribución y las voces de las mujeres que han experimentado diferentes formas de marginación y apoyar sus esfuerzos para asegurar la capacitación técnica.

Los datos usados en este artículo fueron obtenidos de GENNOVATE, una iniciativa de investigación global apoyada por la Fundación Bill & Melinda Gates. Esta es una iniciativa transversal del CGIAR que examina cómo las interacciones entre las normas de género, la agencia y otros factores contextuales conforman el acceso, la adopción y los beneficios de las innovaciones agrícolas en las comunidades rurales de todo el mundo.

Lea el artículo completo:
Explorando cómo las mujeres toman el control de las tecnologías de trigo y maíz en Bangladesh (en inglés)

Otras publicaciones recientes de investigadores del CIMMYT:

  1. Efficient curation of genebanks using next generation sequencing reveals substantial duplication of germplasm accessions. 2019. Narinder Singh, Shuangye Wu, Raupp, W.J., Sunish Sehgal, Sanu Arora, Vijay Tiwari, Vikram, P., Sukhwinder-Singh, Chhuneja Parveen, Gill, B.S., Poland, J. En: Nature Scientific reports v. 9, art. 650.
  2. Soil zinc is associated with serum zinc but not with linear growth of children in Ethiopia. 2019. Tessema, M., De Groote, H., Brouwer, I.D., Feskens, E.J.M., Belachew, T., Zerfu, D., Belay, A., Demelash,Yoseph, Gunaratna, N.S. En: Nutrients v. 11, no. 2, art. 221.
  3. Assessing adoption potential in a risky environment: the case of perennial pigeonpea. 2019. Grabowski, P., Schmitt Olabisi, L., Jelili Adebiyi, Waldman, K., Richardson, R., Rusinamhodzi, L., Snapp, S.S. En: Agricultural Systems v. 171, p. 89-99.
  4. Untangling gender differentiated food security gaps in Bhutan: An application of exogenous switching treatment regression. 2019. Aryal, J.P., Mottaleb, K.A., Rahut, D.B. En: Review of Development Economics v. 23, no. 2, p. 782-802.
  5. Genetic diversity and population structure of synthetic hexaploid-derived wheat (Triticum aestivum L.) accessions. 2019. Gordon, E., Kaviani, M., Kagale, S., Payne, T.S., Navabi, A. En: Genetic Resources and Crop Evolution v. 66, no. 2, p. 335-348.
  6. Molecular characterisation of maize introgressed inbred lines bred in different environments. 2019. Lennin Musundire, Derera, J., Shorai Dari, Tongoona, P., Cairns, J.E. En: Euphytica v. 215, art. 46.
  7. A benchmarking between deep learning, support vector machine and bayesian threshold best linear unbiased prediction for predicting ordinal traits in plant breeding. 2019. Montesinos-Lopez, O.A., Martin-Vallejo, J., Crossa, J., Gianola, D., Hernández Suárez, C.M., Montesinos-Lopez, A., Juliana, P., Singh, R.P. En: G3: Genes, Genomes, Genetics v. 9, no. 2, p. 601-618.
  8. Farmers’ preferences for high-input agriculture supported by site-specific extension services : evidence from a choice experiment in Nigeria. 2019. Oyakhilomen Oyinbo, Chamberlin, J., Vanlauwe, B., Liesbet Vranken, Kamara, A. Y., Craufurd, P., Maertens, M., En: Agricultural Systems v. 173, p. 12-26.
  9. Effects of three in-field water harvesting technologies on soil water content and maize yields in a semi-arid region of Zimbabwe. 2019. Nyagumbo, I., Nyamadzawo, G., Connie Madembo. En: Agricultural Water Management v. 216 p. 206-213.
  10. Genomic selection for winter survival ability among a diverse collection of facultative and winter wheat genotypes. 2019. Beil, C. T., Anderson, V.A., Morgounov, A.I., Haley, S. D. En: Molecular Breeding v. 30, art. 29.
  11. Can minimum tillage enhance productivity? Evidence from smallholder farmers in Kenya. 2019. Jena, P.R. En: Journal of Cleaner Production v. 218, p. 465-475.
  12. 12. Sub-surface drip fertigation with conservation agriculture in a rice-wheat system : a breakthrough for addressing water and nitrogen use efficiency. 2019. Sidhu, H.S., Jat, M.L., Singh, Y., Ravneet Kaur Sidhu, Gupta, N., Singh, P., Pankaj Singh, Jat, H.S., Gerard, B. En: Agricultural Water Management v. 216, p. 273-283.
  13. Genetic dissection of heat and drought stress QTLs in phenology-controlled synthetic-derived recombinant inbred lines in spring wheat. 2019. Caiyun Lu, Sukumaran, S., Claverie, E., Sansaloni, C.P., Dreisigacker, S., Reynolds, M.P. En: Molecular Breeding v. 39, art. 34.
  14. Genetic analysis of cob resistance to F. verticillioides: another step towards the protection of maize from ear rot. 2019. Cong Mu, Jingyang Gao, Zijian Zhou, Zhao Wang, Xiaodong Sun, Zhang, X, Huafang Dong, Yanan Han, Xiaopeng Li, Yabin Wu, Yunxia Song, Peipei Ma, Chaopei Dong, Jiafa Chen, Jianyu Wu. En: Theoretical and Applied Genetics v. 132, no. 4, p. 1049-1059.
  15. Two large-effect QTLs, Ma and Ma3, determine genetic potential for acidity in apple fruit : breeding insights from a multi-family study. 2019. Verma, S., Evans, K., Guan, Y., Luby, J.J., Rosyara, U., Howard, N.P., Bassil, N.V., van de Weg, W.E., Peace, C.P. En: Tree Genetics and Genomes v. 15, no. 2, art. 18.
  16. Yielding to the image: how phenotyping reproductive growth can assist crop improvement and production. 2019. Dreccer, M.F., Molero, G., Rivera Amado, A.C., Carus John-Bejai, Wilson Zoe. En: Plant Science v. 282, p. 73-82.
  17. Development of multiple SNP marker panels affordable to breeders through genotyping by target sequencing (GBTS) in maize. 2019. Zifeng Guo, Hongwu Wang, Jiajun Tao, Yonghong Ren, Cheng Xu, Kunsheng Wu, Cheng Zou, Jianan Zhang, Yunbi Xu. En: Molecular Breeding v. 39, art. 37.
  18. Agriculturally productive yet biodiverse: human benefits and conservation values along a forest-agriculture gradient in Southern Ethiopia. 2019. Baudron, F., Schultner, J., Duriaux, J., Gergel, S., Sunderland, T. En: Landscape Ecology v. 34, no. 2, p. 341–356.
  19. Trends in regional and chronological diversity of maize (zea mays l.) germplasm in Pakistan. 2019. Maqbool, M.A.| Aslam, M. | Issa, A.B. | Babar Manzoor Atta. En: Pakistan Journal of Botany v. 51, no. 2, p. 1-13.
  20. Do metabolic changes underpin physiological responses to water limitation in alfalfa (Medicago sativa) plants during a regrowth period? 2019. Molero, G., Tcherkez, G., Roca, R., Mauve, C., Cabrera-Bosquet, L., Araus, J.L., Nogués, S., Aranjuelo, I. En: Agricultural Water Management v. 212, p. 1-11.
Categorías
Noticias

Las mujeres y los jóvenes encuentran oportunidades de negocio rentables en la mecanización a pequeña escala

Demostración de la mecanización durante una visita de campo a Makonde, Zimbabue, como parte de la reunión de revisión final FACASI Fase 2. (Foto: Shiela Chikulo/CIMMYT)

Según el informe de mecanización del Panel de Malabo, los agricultores africanos tienen diez veces menos herramientas mecanizadas por área agrícola que los agricultores en otras regiones en vías de desarrollo. Durante los últimos seis años, el proyecto del Centro Australiano de Investigación Agrícola Internacional (ACIAR, por siglas en inglés) financió el proyecto Mecanización Agrícola y Agricultura de Conservación para la Intensificación Sustentable (FACASI, por siglas en inglés) el cual ha explorado formas de abordar el acceso deficiente a soluciones de mecanización apropiadas, lo que está costando una pérdida de productividad a los pequeños agricultores.

«Uno de los resultados clave de la iniciativa FACASI ha sido presentar vías para las mujeres y los jóvenes hacia diversas ganancias rentables utilizando mecanización a pequeña escala», dice Alice Woodhead, profesora de economía rural en la Universidad del Sur de Queensland en Australia. Woodhead compartió sus impresiones después de una visita de campo a Makonde, en el noroeste de Zimbabue, como parte de la reunión de revisión final de FACASI Fase 2 celebrada en mayo. Casi 40 socios de proyectos del sector público y privado de Zimbabue y Etiopía y representantes de ACIAR asistieron al evento en Harare.

Maquinaria agrícola: las empresarias prosperan sobre dos ruedas.

Agatha Dzvengwe y Marianne Jaji compartieron su experiencia comercial como proveedoras de servicios de tractores de dos ruedas (2WT) en Makonde. El 2WT, que se puede usar para múltiples propósitos desde el transporte, la siembra, la aplicación de fertilizantes y el desgrane, les permite plantar de manera eficiente y proporciona ingresos adicionales mediante el alquiler de sus tractores a los agricultores vecinos. Por ejemplo, durante la temporada 2018/19, Dzvengwe usó la sembradora Fitarelli para plantar diez hectáreas de maíz, dos hectáreas de alubias y cinco hectáreas de soja. Debido a la eficiencia de la sembradora, tuvo tiempo para rentar los servicios de siembra a los agricultores vecinos, ganando 100 dólares por una hectárea de maíz y el doble en la siembra de soja o alubias.

Marianne Jaji proporciona servicios de desgrane basados en el 2WT, los cuales, según ella, generan ingresos constantes para su hogar, lo que le permite contribuir a decisiones importantes del hogar. A pesar de que la temporada 2018/19 se caracterizó por la sequía, Jaji confiaba en que aún podría obtener un ingreso decente de los agricultores vecinos que contratan los servicios de recolección con el 2WT. Otras proveedoras de servicios lideradas por mujeres informaron sobre el empoderamiento y la disminución de la mano de obra. «Hemos sido liberadas de la carga de trabajar en el campo. Ahora que tengo un 2WT, la sociedad me respeta más».

«En un negocio dominado por hombres, mujeres como Agatha y Marianne pueden convertirse en empresarias exitosas, proporcionando servicios agrícolas importantes para la comunidad, como desgrane, plantación y transporte», explica Bertha Tandayi, asistente de investigación de FACASI en la Universidad de Zimbabue, donde estudia la adopción de tecnologías basadas en los 2WT por mujeres empresarias en los distritos de Makonde y Nyanga.

La mecanización a pequeña escala tiene tasas de adopción más altas en áreas donde se brindan los servicios más rentables, como el desgrane. Los beneficios para los empresarios y la comunidad son visibles e incluyen la creación de empleo, la renovación de viviendas, la acumulación de activos, la cría de ganado, la perforación de pozos y la compra de insumos agrícolas.

Demostración de la mecanización durante una visita de campo a Makonde, Zimbabue, como parte de la reunión de revisión final FACASI Fase 2. (Foto: Shiela Chikulo/CIMMYT)

Una empresa de desgrane sostenible para grupo juvenil de Mwanga

Desde que establecieron su empresa en 2016, después de la capacitación en el marco del proyecto FACASI, el grupo de jóvenes de Mwanga se está fortaleciendo en Makonde. Durante una demostración del desgranador mediano, Masimba Mawire comentó que el negocio del desgrane ha proporcionado ingresos constantes y confiables para el grupo. Los hermanos Shepherd y Pinnot Karwizi agregaron que el grupo se ha beneficiado de la capacitación adicional en mantenimiento, facilitada a través del proyecto FACASI. «Es evidente que los jóvenes han encontrado una manera de trabajar como un equipo de negocios, dándoles un propósito y la aspiración a ser dueños de negocios y no solo empleados», dijo Woodhead.

De los servicios proporcionados a través de las tecnologías del 2WT, los servicios de desgrane son los más demandados, ya que esta tecnología simple reduce significativamente el tiempo dedicado a desgranar las mazorcas de maíz. Un desgranador de tamaño mediano, por ejemplo, produce entre cinco y seis toneladas de grano de maíz sin cáscara al día, diez veces más que el desgranador manual.

Los beneficios de los ingresos, la reducción de la mano de obra y la alta eficiencia de las tecnologías basadas en el 2WT han transformado las vidas de los proveedores de servicios para jóvenes y mujeres. Confiados en su futuro, planean expandir sus portafolios de negocios, buscando opciones de valor agregado como el proceso de poscosecha de otros cultivos.

Categorías
Noticias

“Igualdad para las mujeres: progreso para tod@s”

Han pasado casi 40 años y hoy en día podemos ver que se han logrado grandes avances en la lucha de las mujeres por sus derechos: hay una mayor relación de igualdad en el número de niños y niñas que van a la escuela primaria; la mortalidad materna ha descendido en alrededor de un 66%; en el sector no agrícola 4 de cada 10 empleos los desempeñan mujeres. Sin embargo, pese al impulso que imprimieron los Objetivos de Desarrollo del Milenio (MDM) en la equidad de género y el empoderamiento de la mujer, todavía queda mucho por hacer. Las mujeres siguen padeciendo discriminación cuando se trata de tener acceso a bienes económicos, trabajo, educación, atención médica y participación política. Por ende, es mucho más probable que sean las mujeres las que vivan en pobreza, tengan menos acceso a fuentes de financiamiento e información, y menos oportunidades de romper este ciclo, sobre todo en el sector dedicado a la agricultura.

En el CIMMYT hacemos nuestro mejor esfuerzo por salvar la brecha del género y trabajamos en pro de aumentar la producción en los campos de los agricultores, como una manera de contribuir a la seguridad alimentaria, al crecimiento económico y al bienestar social. Mediante sus proyectos en África, Asia y América Latina, el CIMMYT ha promovido activamente la participación de la mujer en la ciencia, en el sector del desarrollo, en las cadenas de valor y en la mecanización de la agricultura. El CIMMYT procura la integración del género en la etapa de diseño de sus proyectos y en la implementación de éstos. Los CRP MAIZE y WHEAT aprobaron su estrategia de integración de género, y en 2014 y 2015 todos los CRP participarán en la realización de un estudio trasversal de género.

La inequidad de género en la agricultura impone costos no solo para las mujeres en sí, sino para sus familias, la sociedad y el sector agrícola en conjunto. Según estimaciones de la FAO, si las mujeres tuvieran acceso a los mismos recursos que los hombres, sus cultivos rendirían entre 20 y 30% más e invertirían sus ganancias en cuidar su salud, incluir alimentos más nutritivos en su dieta y dar educación a sus hijos. Si las mujeres tuvieran el mismo acceso a recursos, la producción del campo en los países en desarrollo aumentaría de 2.5 a 4%, con lo cual se podría alimentar a poco más de 150 millones de personas adicionales.

En África, los proyectos Sistemas de Producción de Maíz y Leguminosas para la Seguridad Alimentaria en el este de la Provincia de Zambia (SIMLEZA) y Maíz Tolerante a Sequía para África (DTMA) han fomentado la participación de las mujeres en la toma de decisiones, dándoles la oportunidad de expresar su opinión en grupos formados solo por mujeres. En Asia, la Iniciativa para la Producción Cerealícola en el Sur de Asia (CSISA) contrata personal femenino para llegar a más agricultoras; a éstas últimas se les ha proporcionado tecnologías que ahorran recursos, adaptadas a sus necesidades, como sembradoras manuales portátiles y sembradora mecanizadas. Mediante el proyecto Investigación sobre la Producción de Maíz en Laderas (HMRP), en Nepal, hemos ayudado a que las mujeres tengan acceso a semilla, por conducto de grupos de producción comunitarios, y hemos instruido a las mujeres que a su vez instruyen a otras mujeres en sus comunidades. Las mujeres han logrado aumentar su producción de maíz de 20 a 50% como resultado directo de la intervención del HMRP. De igual manera, en México, el proyecto Desarrollo Sustentable con el Productor (Take it to the farmer) ha estado promoviendo la participación de mujeres en las áreas de investigación y extensión.

Si bien estos son logros importantes, el trabajo del CIMMYT no ha concluido; sabemos que tendremos que dedicar incluso más esfuerzos para atender los asuntos de género y diversidad. Promover un acceso equitativo a recursos, un mayor conocimiento sobre la equidad de género en los proyectos del CIMMYT y la participación de la mujer en la toma de decisiones en todos los niveles, ayudará a salvar todas estas diferencias en la agricultura. En este mes de marzo, reflexionemos sobre nuevas formas de empoderar a las mujeres y en cómo nuestro trabajo empodera a hombres y mujeres por igual.