Categorías
Noticias

La rotación de cultivos, clave para lograr parcelas más rentables

En el municipio de la Barca, Jalisco, el predominio del monocultivo en la superficie agrícola de temporal es notorio. De acuerdo con estadísticas recientes, de un total de 154,758 hectáreas sembradas durante 2018, 90% de la superficie correspondió a maíz; 8.8%, a sorgo; y sólo 1.2%, a cultivos alternativos como garbanzo, frijol, tomate verde y cebolla (SIAP, 2019). El problema del monocultivo es que a largo plazo propicia la pérdida de biodiversidad y de fertilidad del suelo; una mayor susceptibilidad de los cultivos a plagas, enfermedades y malezas; y —como consecuencia— un consumo mayor de agroquímicos, con efectos negativos en la salud y el ambiente.

Por lo anterior, en la plataforma de investigación Ocotlán —en la que colaboran Xochicentli y el Hub Bajío, del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT)— se realizan estudios sobre rotación de cultivos. La importancia de estos estudios radica en que la diversificación de las especies cultivadas aporta múltiples beneficios a los productores: mejora el balance de nutrientes, la materia orgánica en los suelos y el aprovechamiento del agua; tiene un efecto regulador sobre las poblaciones de plagas, malezas y enfermedades; y, además, diversifica los ingresos y brinda mayores oportunidades para acceder a mercados.

Durante el ciclo otoño-invierno 2018-19 se realizó rotación de avena con maíz (el maíz fue el cultivo precedente). Con el uso de biofertilizantes se obtuvieron rendimientos de entre 25.3 y 31.6 t/ha de avena en verde. Estos resultados estuvieron por encima de los reportados para el municipio de la Barca por el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) en 2018.

La inclusión de la avena en la rotación fue por su aptitud forrajera y porque permite tener una cosecha adelantada con respecto al trigo. Además de su aprovechamiento para la alimentación animal, la avena aporta a la calidad del suelo, pues sus raíces penetran las capas más profundas, dejando una estructura porosa que permite que el agua se infiltre en el suelo y quede disponible para cultivos futuros. Este es un ejemplo de los diversos beneficios de rotar cultivos.

Debido a que las leguminosas y las oleaginosas —de las cuales se obtiene aceite— son buenas opciones para la rotación de cultivos, actualmente en la plataforma de Ocotlán se evalúa el cultivo de girasol para rotaciones en condiciones de temporal, pues ofrece ventajas como un ciclo de cultivo corto, una buena respuesta a condiciones de lluvias limitadas y una mayor tolerancia a la sequía (en comparación con los cultivos básicos).

Otros de los beneficios del girasol es que su semilla tiene un alto contenido de aceite (entre 35 y 45%) y posee una calidad nutricional alta, por lo que es muy apreciada por la industria aceitera. Con la pasta sobrante de la extracción pueden elaborarse concentrados para la alimentación animal y las cabezas sin semillas son una fuente rica en proteínas y pueden usarse molidas para aves o ganado. Y en verde se puede ensilar para forraje. A pesar de esto, la producción nacional sigue siendo pequeña.

Rotar cultivos ofrece varios beneficios. Además de los expuestos, ayuda a regular plagas y malezas; beneficia la fertilidad del suelo; y —en la parte económica— minimiza los riesgos de mercado, ya que al tener diferentes cultivos los productores no están limitados por el precio de un solo producto.

Esta nota es parte de la campaña #CultivosSustentablesBajío, la cual promueve una agricultura diferente, social y ambientalmente responsable. La campaña contempla diversos eventos demostrativos y recorridos en campo para mostrar las prácticas e innovaciones sustentables que promueven el Hub Bajío —del CIMMYT— y sus colaboradores en los estados de Michoacán, Jalisco y Querétaro. ¡Súmate!

Categorías
Noticias

El CIMMYT, presente en la Agroalimentaria Zacatecas para lograr sistemas integrales y prosperidad

La estrategia de innovación de los sistemas agroalimentarios del CIMMYT se implementa en Zacatecas con suelos mejorados, mecanización inteligente y girasol y sorgo para rotar cultivos y generar ingresos.
Por: Edith Flores Romo, formadora MasAgro en Zacatecas.
26 de agosto de 2019.

Zacatecas, Zac.- El Gobierno del estado convocó a la segunda edición de la Agroalimentaria Zacatecas 2019 Food Show, evento con el que se fortalece el potencial de los negocios agropecuarios del país y se fomenta el conocimiento y el comercio entre los diferentes actores de las cadenas productivas. Participaron cerca de 250 expositores, productores agropecuarios y empresas de las cadenas agroalimentarias de todo el país; además, se contó con la presencia de conferencistas de más de 10 países diferentes.

En este importante evento el doctor Bram Govaerts, director del Programa de Desarrollo Estratégico del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), ofreció la conferencia magistral Desde Semillas para la Paz hacia Sistemas Integrales para la Prosperidad ante estudiantes, productores, empresarios, investigadores y funcionarios públicos y representantes de instituciones públicas y privadas.

La conferencia planteó interrogantes en torno al impacto de la agricultura en el planeta: ¿qué tan estables son nuestros sistemas alimentarios?, ¿cuánto crecimiento más pueden ofrecer sin colapsar?, ¿aumentamos los ingresos de los productores si incrementamos el rendimiento? Con estas preguntas se abre la visión para identificar los retos que enfrenta el estado de Zacatecas, el país y el mundo. Este panorama expone la urgente necesidad de cambiar de enfoque: de productos básicos a sistemas agroalimentarios.

La estrategia que el CIMMYT impulsa en México y el mundo tiene como metas producir más con menos, aumentar el valor agregado de la producción de grano e incrementar la resiliencia de los sistemas productivos, para aumentar la eficiencia y efectividad mediante procesos incluyentes y no lineales y hacer frente a cinco retos fundamentales que existen también en el estado: altos costos de producción; monocultivo de frijol y maíz sembrado con labranza excesiva, que reduce la presencia de materia orgánica; suelos semiáridos y ácidos; escasez y manejo ineficiente del agua; y libre pastoreo.

El doctor Bram expuso que la innovación y la ciencia pueden dar soluciones para remediar los suelos ácidos en el estado, como la aplicación de cal agrícola y cal dolomítica en diversos módulos demostrativos que fueron instalados por el CIMMYT y sus colaboradores en parcelas de productores en Zacatecas (en La Lobera, Palo Alto, Teúl y Atolinga) desde 2014, empezando con 2 hectáreas y tres productores. Se beneficiaron 986 hectáreas en el ciclo primavera–verano (PV) 2018, con la participación de 159 productores. Antes de utilizar los mejoradores de suelos, los productores aplicaban 500 kilos de fertilizante; hoy sólo usan 350 kilos o menos. En 2014 el rendimiento en grano de maíz fue de 2 t/ha; en cambio, en el ciclo PV 2018 fue de 8 t/ha.

Govaerts mencionó también que en Guadalupe y Sombrerete, dos municipios donde existen puntos de maquinaria hecha a medida, el CIMMYT ha desarrollado en equipo con herreros del Taller Brasa dos máquinas para siembra de tres cuerpos, con nueve líneas de frijol y maíz, que llevan 1,200 horas trabajadas en los ciclos PV 2018 y PV 2019.

Una innovación tecnológica que también se ha difundido es la rotación de cultivos. El girasol y el sorgo forrajero son cultivos rentables tanto ambiental como económicamente para los productores de la región, ya que son una excelente alternativa comercial al frijol, aportan materia orgánica al suelo, reducen la erosión causada por el viento y requieren mano de obra mínima para su producción. Govaerts enfatizó la importancia de la participación de 237 productores que cultivan 42 áreas de impacto con girasol (aproximadamente 3,000 hectáreas), cuyo rendimiento es de 1,050 kg/ha, con un costo de $7,250/ha, generando una ganancia para el productor de $3,740/ha.

Hacer frente a estos retos es posible con una estrategia en la que participen el sector público y privado y pequeños, medianos y grandes productores trabajando estrechamente con investigadores que difundan la ciencia para promover el desarrollo y la vinculación a mercados, además de la adopción de prácticas sustentables como la Agricultura de Conservación, la reconversión a maíz híbrido de comercializadoras locales, el Manejo Agroecológico de Plagas, la mecanización inteligente y la diversificación de cultivos. Estas son un conjunto de acciones para lograr la seguridad nacional, la conservación del ambiente y la buena nutrición de la población.

“Trabajemos para lograr que el campo sea el primer motor de desarrollo de los pueblos y vencer el hambre y la pobreza mediante sistemas de innovación agroalimentaria desde lo local”, enfatizó el doctor Govaerts durante su conferencia, y convocó a la suma de esfuerzos.

En el marco de las actividades, Govaerts sostuvo varias reuniones de trabajo, con Grupo Agrocime, la red de formadores del Hub Intermedio Grano Pequeño, técnicos certificados en Agricultura Sustentable del CIMMYT, productores de frijol orgánico de diversas localidades del estado, el Sistema Producto Maíz de Aguascalientes, representantes de la Subsecretaría de Suelo y Agua —de la Secretaría del Campo de Zacatecas (Secampo)— y representantes de la SADER en Zacatecas. En cada reunión se reiteró el compromiso para colaborar con el proyecto MasAgro e impulsar la estrategia que el CIMMYT ha desarrollado a lo largo de su historia, en beneficio de miles de productores y de sus familias.

Categorías
Noticias

Se premian trabajos innovadores en seguridad alimentaria y sustentabilidad

  • Cargill México y el CIMMYT realizaron la cuarta premiación de los proyectos más innovadores en beneficio de la producción agrícola sustentable en México. Los premios fomentan la generación de iniciativas de producción de alimentos seguros, nutritivos y asequibles para la población.
  • Los ganadores fueron el doctor Ernesto Solís, del INIFAP, por el desarrollo de nuevas variedades de trigo; Paul García, de MasAgro Guanajuato, por la estrategia #RetoRastrojoGTO; y el productor Carmen Martínez, por la cadena de valor de girasol en Zacatecas.

Por: Comunicaciones corporativas-CIMMYT.

3 de julio de 2019.


Texcoco, Edo. Méx.- En las instalaciones del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) se realizó la entrega de los Premios Cargill-CIMMYT a la Seguridad Alimentaria y la Sustentabilidad, los cuales se otorgan a quienes han logrado un impacto positivo demostrado en producción, rentabilidad, sustentabilidad, innovación, nivel de adopción, visibilidad y aplicación o extensión de prácticas, innovaciones, tecnologías o actividades en beneficio de la producción agrícola sostenible en México.

A los premios se postulan proyectos de todo el país, los cuales son evaluados por un comité integrado por representantes de Cargill México e investigadores del CIMMYT. Posteriormente, un consejo de expertos dictamina cuáles proyectos son los ganadores. En esta edición, a la convocatoria aplicaron 34 proyectos de diferentes estados.

Este año, en la categoría Investigador —donde concursan científicos e investigadores en agronomía; genética; mejoramiento de maíz, trigo, cebada o sorgo; y tecnologías de la información y la telecomunicación aplicadas al sector agroalimentario— ganó el doctor Ernesto Solís Maya, del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), por el proyecto ‘Variedades de trigo’.

En la categoría Líder de Opinión —dirigida a líderes de asociaciones de productores, técnicos y profesionales de la comunicación que trabajan en el sector agroalimentario— el ganador fue Paul García Meza, de MasAgro Guanajuato, por la estrategia #RetoRastrojoGTO. Y, finalmente, en la categoría Productor —dirigida a productores de granos básicos, como maíz, trigo, cebada y sorgo— el premio fue para el señor Carmen Martínez García, por ‘La cadena de valor de girasol en Zacatecas’.

Para el doctor Solís Maya, “el premio es el reconocimiento a la labor en el desarrollo de variedades que han logrado incrementar el rendimiento de trigo en Guanajuato”. De acuerdo con el investigador, son las alianzas entre instituciones —como el INIFAP, el CIMMYT y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural— las que pueden acortar el tiempo de obtención de semillas con características adecuadas para el cambio climático; por esto el premio es importante, pues permite potenciar estas alianzas para que los productores, ante las nuevas condiciones ambientales, puedan mantener o incrementar sus rendimientos en beneficio de la seguridad alimentaria mundial.

Por su parte, Paul García Meza, de MasAgro Guanajuato, manifestó que “la estrategia por la que nos premian tiene por objetivo que las prácticas sustentables lleguen al productor. Promovemos principalmente la Agricultura de Conservación porque le permite (al productor) tener ahorros significativos que se reflejan en mejoras en su calidad de vida. La estrategia es replicable; en Jalisco y Michoacán ya se está haciendo. En Guanajuato hemos realizado 56 eventos donde se capacita al productor, desde la siembra, el manejo de rastrojo, la fertilización y el manejo de plagas y enfermedades, y con esto hemos llegamos a un público de más de 2,000 personas en tan solo unos meses de operación de la estrategia”.

Para finalizar, el doctor Martin Kropff, director general del CIMMYT, declaró que “con este premio, el CIMMYT y sus aliados buscan identificar y reconocer las actividades, prácticas, tecnologías y conductas de liderazgo que fortalecen la seguridad alimentaria y la sustentabilidad de México”.

Categorías
Noticias

La plataforma de investigación Soledad de Graciano Sánchez brinda innovaciones y alternativas para la rotación de cultivos a productores de San Luis Potosí

La alianza entre el CIMMYT y el INIFAP, a través de la plataforma de investigación Soledad de Graciano Sánchez, brinda alternativas para la diversificación de cultivos y prácticas sustentables amigables con el ambiente.
Por: Pedro Castillo Vargas, formador MasAgro en San Luis Potosí.
3 de abril de 2019.

San Luis Potosí, SLP.- El CIMMYT trabaja hombro a hombro con el INIFAP para impulsar la innovación de los sistemas agroalimentarios con prácticas sustentables que ayuden a los pequeños agricultores a producir más con menos, conservar los recursos naturales y contribuir a mitigar los efectos del cambio climático. Y la Plataforma de investigación Soledad de Graciano Sánchez, en San Luis Potosí, es un espacio donde se desarrollan soluciones para atender las principales problemáticas agrícolas que se presentan en la región.

Para fortalecer la interacción entre los actores responsables de llevar el conocimiento al productor, el MC José Alberto Cabello Cortés, gerente del Hub Intermedio Grano Pequeño; el ingeniero Abel Saldivia Tejeda, coordinador de plataformas; y el ingeniero Pedro Castillo Vargas, formador MasAgro, visitaron las instalaciones del INIFAP SLP, donde la plataforma Soledad de Graciano Sánchez es atendida por el doctor Miguel Ángel Martínez Gamiño, investigador del INIFAP.

El doctor Martínez compartió el trabajo desarrollado en las diferentes áreas de cultivo de la plataforma, entre ellas la del alverjón forrajero, el cual presenta floración indeterminada y del que se espera una producción de materia seca de 4 t/ha  en el ciclo otoño-invierno. Además, se identifica como una alternativa importante para que productores de la región implementen la rotación de cultivos en el ciclo OI. Para ello, es necesario realizar días demostrativos con productores de Villa de Reyes para compartir información sobre los beneficios de estas prácticas, como mayor acceso a forraje, el cual además es de excelente calidad.

La participación del ingeniero Abel Saldivia Tejeda se tradujo en acuerdos para fortalecer la vinculación y las actividades de investigación. Él sugirió el establecimiento de girasol en la plataforma con la finalidad de dar una opción más de producción, ya que el girasol es un producto que se cotiza bien en el mercado), y coincidió en que para lograr el escalamiento de las innovaciones que se desarrollan en la plataforma —y vincularlas de forma efectiva con el entorno local y regional— es necesaria la participación de actores del sector público, el H. Ayuntamiento, la coordinación de Desarrollo Rural y, sobre todo, los productores y técnicos del municipio.

El doctor Miguel Ángel Gamiño estuvo de acuerdo con que la región agrícola más apta para la siembra de girasol se encuentra en el municipio de Villa de Reyes, gracias al clima de la región, a la calidad de los suelos y a que es una zona con sistemas de riego. Para promover la diversificación y la rotación de cultivos y que más productores aprovechen sus beneficios, se buscará un acercamiento con productores y actores clave para impulsar la siembra de girasol y alverjón, implementados en la plataforma como cultivos de rotación.

La reunión estuvo presidida por el MC José Alberto Cabello, quien propuso que en la semana del 8 al 12 de abril el ingeniero Pedro Castillo buscara una reunión con el H. Ayuntamiento de Villa de Reyes con el fin de acordar acciones e invitarlos a participar en los eventos de la plataforma, además de impulsar la siembra de estos dos cultivos para promover la diversificación de cultivos.

 

 

Categorías
Noticias

El CIMMYT promueve acciones para regenerar los suelos y asegurar su productividad para las generaciones futuras

Tlaxcoapan, Hgo.- La Agricultura de Conservación (AC) es un sistema de cultivo que impulsa la regeneración de los suelos a través del mantenimiento y el aprovechamiento de los nutrientes que se le pueden ofrecer. Sus principios son la rotación de cultivos, el mínimo movimiento del suelo y el manejo de rastrojos. La importancia de la práctica de la Agricultura de Conservación en los diversos estados que conforman el Hub Valles Altos del CIMMYT (Hidalgo, Tlaxcala, Puebla y Estado de México) se manifiesta en el impacto positivo que genera para el ambiente, el mejoramiento de la calidad de los cultivos, la reducción de los costos de producción y la regeneración de los suelos.

El Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), a través del equipo técnico del Hub Valles Altos, realiza actividades de validación y prueba de cultivos alternativos y de cobertura con el objetivo de observar el desempeño de materiales para coberturas vivas en otoño-invierno en el Valle de Mezquital, Hidalgo, como alternativa y complemento al Manejo Integrado de Malezas y el Manejo Agroecológico de Plagas. Durante 2019 se impulsarán acciones por los suelos que, en colaboración con productores y colaboradores del CIMMYT, promoverán estas prácticas para regenerarlos y asegurar la productividad futura, con miras al 2030.

“Lo que busca la Agricultura de Conservación es evaluar una nueva forma de manejo de cultivos y el uso de la mezcla de cultivos de cobertura de diferentes especies”, mencionó Paco Olguín, coordinador técnico del Hub Valles Altos.

Se realizó una visita guiada en colaboración con el doctor Ravi Gopal Singh, especialista del CIMMYT, con los coordinadores técnicos del Hub Valles Altos: Francisco Olguín, de Hidalgo; Pablo Maya, de Estado de México; Gerardo Lara, de Puebla; y Antonio Olvera, de Tlaxcala. Tuvieron un acercamiento con las parcelas en las que se implementan los cultivos de cobertura en Tlaxcoapan, Hidalgo, y en la Universidad Politécnica de Francisco I. Madero (UPFIM).

En Tlaxcoapan se implementa la mezcla de cultivos; entre ellos se encuentran el ebo y el chícharo, como fuente de nitrógeno; la canola y el rábano, para descompactar el suelo, de tal modo que genere sanidad en el mismo; la linaza y el girasol, para atraer insectos beneficios para el cultivo; la lenteja; y el trigo.

Dentro de la práctica y la investigación de los cultivos de cobertura, se generó un acercamiento con uno de los productores de la zona, a quien se le dio una introducción acerca de la mezcla de los cultivos de cobertura y las ventajas que estos presentan para el cultivo, ya que también atraen una variedad de insectos y organismos benéficios para el suelo que disminuyen las plagas, con lo que se puede observar un impacto en los costos de producción, optimizando el cultivo.

Continuando con el recorrido en la UPFIM, se analizaron las condiciones en las que se encontraba la mezcla de cultivos, tratada tanto en la agricultura convencional como en Agricultura de Conservación. Además, se observó cómo repercuten las condiciones de temporal, para aprovechar y reciclar los nutrientes que ofrece el suelo con la rotación de cultivos, así como la humedad residual. Y se examinó el proceso de descomposición del rastrojo y la captación de fósforo, carbono y nitrógeno en el suelo.

“Los humanos y los animales somos una fotografía bioquímica del suelo; si aumentamos la calidad del suelo con la implementación de cultivos de cobertura, obtendremos un ecosistema saludable”, aseguró el doctor Ravi Gopal, especialista del CIMMYT.

Categorías
Noticias

Busca MasAgro Guanajuato sistemas de producción más rentables con alternativas sustentables

En la plataforma de investigación de San Luis de la Paz productores se capacitan en MAP.

 

Por: Aidee Albarrán Contreras, coordinadora de plataformas, y Ramón Barrera, divulgación MasAgro Guanajuato.

 

San Luis de la Paz, Gto. – En la plataforma de investigación MasAgro, establecida en la comunidad Fracción de Lourdes, de este municipio, productores participaron en la capacitación sobre Manejo Agroecológico de Plagas (MAP), una alternativa viable que, al aplicarse, contribuye a contar con sistemas de producción más sustentables y rentables.

MAP es el conjunto de prácticas y técnicas que buscan prevenir y reducir el desarrollo de las plagas agrícolas para que no lleguen a tener poblaciones altas que puedan ocasionar daño a los cultivos. En esta región, en los dos ciclos, los productores siembran maíz y frijol para consumo humano y cultivos alternativos forrajeros para alimento del ganado.

Con base en el programa, el primer tema, impartido por el ingeniero Fredy Hernández, técnico MasAgro, fue control biológico. Explicó que existen dos tipos de organismos en los cultivos, los benéficos y las plagas. Los primeros se pueden encontrar de manera natural en la parcela o pueden aplicarse para el manejo de plagas; para el segundo caso, se tienen los parasitoides, depredadores y entomopatógenos, como hongos y bacterias. Recomendó preservar estos microorganismos porque son los que regulan naturalmente las poblaciones de las plagas. Se colectaron organismos benéficos en el campo para que los productores los identifiquen cuando trabajen en sus parcelas.

El control etológico fue el segundo tema, expuesto por el ingeniero Julio Ledesma. Etología es el estudio del comportamiento de los insectos en relación con el ambiente. De modo que, el control etológico de plagas es la utilización de métodos de represión que aprovechan las reacciones de comportamiento de los insectos. Explicó que el triángulo de las plagas está compuesto por: un ambiente favorable, un hospedero susceptible (planta débil) y la presencia de un organismo virulento (que tiene una tasa de reproducción muy alta), y que, al eliminar uno de estos pilares, se evita el desarrollo de la plaga.

Como práctica, se realizó la revisión de 20 plantas de maíz para detectar cuántas fueron dañadas por gusano cogollero, se hizo el cálculo del porcentaje de daño y se explicó el umbral de daño económico, que para gusano cogollero es entre 15 y 20%; al obtener estos porcentajes, se recomienda la aplicación preventiva de un insecticida biorracional o de bajo impacto.

El ingeniero también habló sobre las trampas con feromonas y cómo se atrae a los machos para evitar el apareamiento de las palomillas, y dijo que, por cada macho atrapado, en promedio, nos libramos de 1,350 huevecillos en la parcela. Por tal razón, es importante controlar la reproducción de la especie.

El investigador Miguel Hernández, del INIFAP, abordó el tema de cultivos alternativos como control cultural. Explicó que una forma de quitar el ambiente favorable para la plaga es realizar rotación de cultivos, estableciendo aquellos que no son hospederos de plagas. Entre esos cultivos figuran la remolacha, el girasol, la canola y el ebo, los cuales se pueden emplear como forraje porque tienen un alto contenido de proteína.

Por su parte, el ingeniero Fernando Fernández, consultor del despacho CyASA, impartió el tema de control biorracional, que se refiere al uso de sustancias de origen natural que no son tóxicas para el ser humano ni el ambiente. Presentó varias plantas que se pueden usar para el control de distintas plagas y explicó la manera en que se realizan los extractos de higuerilla, neem, chicalote, tabachín, canela, ajo y chile.

El tema del control químico fue expuesto por el ingeniero Horacio Soto, quien señaló que es la última opción dentro del MAP y consideró que se deben conocer los ciclos de la plaga y el cultivo y el agroquímico que se aplicará, para que se haga en el momento adecuado y tenga la mayor eficacia posible.

Al terminar la capacitación, se realizó un recorrido por la plataforma para dar a conocer su función y los tratamientos que en ella hay y permitir el intercambio de experiencias entre los técnicos del equipo MasAgro Guanajuato y los productores.

En MasAgro Guanajuato hacemos MAP.

Categorías
Noticias

Se fortalece MasAgro Guanajuato con los programas de Extensionismo Pequeños Productores y Desarrollo de Capacidades

De la mano del CIMMYT, la SAGARPA y la SDAyR, se brindan herramientas de soporte, capacitación, soporte técnico, seguimiento en campo y evaluación para el proceso de asistencia técnica a extensionistas del estado, con el objetivo de incrementar la producción de alimentos y fortalecer el desarrollo comunitario.
Por: Ramón Barrera, Divulgación MasAgro Guanajuato.

Celaya, Gto.- Con los programas de Extensionismo Pequeños Productores y Desarrollo de Capacidades 2018 se busca apoyar a pequeños productores de Guanajuato con servicios de innovación, extensión y capacitación para incrementar la producción de alimentos y fortalecer el desarrollo comunitario en las zonas rurales. El pasado 9 de mayo arrancaron oficialmente ambos componentes, que cuentan con el respaldo del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) como instancia de seguimiento.

En el auditorio “Francisco Merino Rábago”, de la delegación estatal de la SAGARPA, 59 profesionales de la agronomía recibieron los lineamientos para ser los agentes de cambio que acompañen a los pequeños productores a través de la capacitación y la asistencia técnica en la adopción e implementación de tecnologías que contribuyan a mejorar sus sistemas de producción.

Atestiguaron el evento el subsecretario para el Desarrollo y la Competitividad Agroalimentaria de la SDAyR, Rito Vargas Varela; el director de Innovación Tecnológica Agrícola, Francisco Becerra; y el gerente de MasAgro Guanajuato y representante del CIMMYT en Guanajuato, Erick Ortiz Hernández.

El programa de Desarrollo de Capacidades tiene como objetivo capacitar y brindar asistencia técnica y administrativa a unidades de producción con actividad agroalimentaria y económica del sector rural para fortalecer su productividad, rentabilidad y sustentabilidad. Para este programa, 19 técnicos trabajarán en los cultivos de maíz amarillo, maíz blanco, cultivos de alternativa (nogal, olivo, sábila, girasol e higuerilla) y hortalizas. Mientras que para el componente de Extensionismo Pequeños Productores, 50 agentes de cambio trabajarán en los sistemas frutícola, maíz, frijol y girasol.

El trabajo de estos extensionistas será apoyar a las unidades de producción que se dedican a actividades agroalimentarias y económicas en el sector rural con servicios de capacitación para fortalecer su productividad y fomentar la asociatividad, modernización, adaptación y adopción de tecnologías sustentables en estas unidades y en las cadenas de valor, los sistemas producto y los territorios.

Como parte de las actividades del arranque de estos dos programas, el grupo de extensionistas se trasladó hasta el municipio de Villagrán, en el parque Agro Tecnológico Xonotli, donde MasAgro Guanajuato tiene establecida una plataforma de investigación en Agricultura de Conservación.

Se realizó un recorrido de campo y el ingeniero Bartolo González, responsable técnico; Aidé Albarrán, coordinadora de plataformas; y Francisco Buenrostro, coordinador de fertilidad, ofrecieron una plática sobre los tratamientos establecidos en los cultivos y las tecnologías implementadas que están contribuyendo a mejorar la agricultura en la entidad guanajuatense.

Esta integración de agentes de cambio permitirá lograr un cambio con enfoque regional donde trabajarán alineadas las diferentes estrategias que confluyen en el territorio.

Categorías
Noticias

México tiene todo para retomar el orgullo, como país, de ser líder en innovación y ciencia en maíz, trigo y muchos otros cultivos: Bram Govaerts

“El gran potencial que México tiene para que su agricultura sea el motor de sistemas agroalimentarios que brinden nutrición, cuiden el medio ambiente y faciliten la seguridad agroalimentaria nacional e internacional” es, para el doctor Bram Govaerts, representante regional del CIMMYT en América, no sólo motivo de orgullo para todo el país, sino una oportunidad excepcional para éste y para el mundo.

Por: Hugo Castellano, consultor de comunicación.

 

Ciudad de México, CDMX.- ¿Hacia dónde va la agricultura y cómo enfrenta la desigualdad, el cambio climático y la demanda regional y global de alimentos? El CIMMYT y el Programa MasAgro tienen respuestas respecto a este tema que es más vigente que nunca y que lo será en el futuro próximo, incluso en dos o tres décadas.

En el marco del Foro Nacional de Maíz del pasado 7 de marzo, el doctor Govaerts hizo referencia en una entrevista a la importancia de todo el trabajo que se realiza en el CIMMYT, desde hace medio siglo, y al claro éxito de MasAgro como programa: sus logros y avales obtenidos.

La investigación se plantea ambiciosas metas, se trata de una labor que integra a México y el mundo, con colaboraciones de diversas organizaciones, resultados concretos y mucho trabajo. Entre otras cosas, el Banco de Germoplasma del CIMMYT resguarda “28,000 diferentes maíces, y a partir de esa biodiversidad, hemos generado nuevas semillas”, señala el doctor Govaerts, “tanto de híbridos como de criollos, las cuales usan los productores”. El resultado de ese esfuerzo no es menor e implica un beneficio considerable, pues “aumentan con ello su productividad”.

Otro gran reto que se afrontó es el acompañamiento técnico, que se traduce en conocimiento que va más allá de los esquemas usuales. Así, la labor de desarrollo se transforma en más efectividad. El representante regional del CIMMYT en América arroja un dato importante: “En toda la historia del Programa PROAGRO Productivo, que antes daba sólo liquidez a los productores, nunca antes se consolidó —como en este año— la combinación de liquidez con asistencia técnica o acompañamiento técnico para que los productores apliquen prácticas como Agricultura de Conservación, ya que éstas no sólo generan más grano, sino que lo hacen de una manera más amigable con el medio ambiente y aumentan sus ingresos”.

Si se habla de estándares, el CIMMYT, MasAgro y PROAGRO Productivo los cumplen —y con creces— en la labor investigativa, técnica y hasta económica. Consolidando este programa como un ejemplo que se empieza a expandir fuera del territorio mexicano debido a sus exitosos recorridos. “Es muy importante resaltar que esto responde a una recomendación de la FAO de hacer del Programa PROAGRO Productivo la política pública rectora para la productividad, sustentabilidad y producción del grano que México requiere”.

“Hemos recorrido mucho camino; hay mucho por hacer, pero tan sólo estos ejemplos demuestran el gran potencial que México tiene para que su agricultura sea el motor de sistemas agroalimentarios que brinden nutrición, cuiden el medio ambiente y faciliten la seguridad agroalimentaria nacional e internacional”.

El doctor Govaerts explica con claridad con qué tipo de materiales se trabaja: “Estamos hablando de semillas no transgénicas. Todas las semillas que utilizamos o que trabajamos con los productores no son transgénicas, sino híbridos, variedades o —incluso— criollos mejorados que podemos comparar un poco con cuando tienes una mujer inteligente y un hombre guapo y lo que quieres son hijos inteligentes y guapos, lo mismo pasa con las semillas. Es importante resaltar que con la biodiversidad que tiene México, con las semillas, y las buenas prácticas e innovaciones, se podrán aumentar los rendimientos para que en 2030 podamos producir 75% de la necesidad de maíz del país, el modelo que hemos probado se llama MasAgro”, y agrega que éste tiene reconocimientos internacionales de prestigio, como el Foro Económico Mundial, y que “Colombia está pidiendo a México poder aplicar esa metodología”.

Respecto de la importancia, el impacto y los éxitos consolidados del Programa, el doctor Govaerts sostiene que, por ejemplo, “El Colegio de México hace un llamado a que en México, tanto el gobierno como todos sus actores, amplíen el modelo de MasAgro que hemos operado a partir del CIMMYT, gracias a la visión de la SAGARPA y con más de 150 colaboradores y —especialmente— con 300,000 productores”.

México puede retomar el orgullo, como país, de ser líder en la innovación y la ciencia en maíz, trigo y muchos otros cultivos. En los años 70 una persona ejemplar, llamada Norman Borlaug, recibió el Premio Nobel de la Paz gracias a su trabajo con miles de productores en México —en el Bajío, el centro, el norte, Sonora y Sinaloa—, porque a partir de ese trabajo y la innovación en los años 70, cuando se mandaron al mundo innovaciones, se salvaron mil millones de personas.

Hoy yo estoy convencido de que México de nuevo debe retomar su papel de líder mundial en la innovación agrícola, tenemos todo el potencial para hacerlo, pero como también dijo el doctor Borlaug: “Con potencial no damos de comer a nadie”. Tenemos que juntarnos, dejar atrás oposiciones e intereses personales y unirnos por un objetivo, que es poner a México a la vanguardia de la innovación. Y que México no sólo sea el ejemplo para la región, donde ya está tomando este papel, sino para el resto del mundo.

En este sentido, quiero resaltar que, por ejemplo, grandes compradores de maíz han volteado a ver a México para decir: “en lugar de comprar cualquier grano de maíz, quiero empezar a comprar grano de los productores mexicanos —pequeños productores— para mis productos, ya sean tortillas o cereales”. Entonces, México empieza a ser un ejemplo de la trazabilidad y el valor que encuentran los consumidores, quienes hoy requieren que los productos no sólo sean nutritivos, sino que desde el campo hasta el plato podamos saber el impacto de nuestro consumo en el medio ambiente. Adicionalmente, si incorporamos los 5 millones de pequeños productores mexicanos a esta cadena productiva, cerramos la brecha de desigualdad, y esto hace que la agricultura se vuelva un motor de desarrollo para el país.

Los ejidatarios y pequeños dueños son productores que tienen o trabajan menos de 5 hectáreas. Obviamente, lo que queremos con ellos es que sus familias tengan un sistema agroalimentario, no que sólo produzcan maíz, frijol, girasol u otros. Por qué no agregar valor al hecho de que ellos producen maíz azul, facilitando su difusión en los mercados extranjeros donde este tipo de maíz produce mucho interés.

Todos estos sistemas tienen que dar aliento a los productores y, especialmente, a sus familias.

Estamos orgullosos de poder demostrar que 21% de los participantes son mujeres y jóvenes productores que utilizan nuevas tecnologías como celulares y otros dispositivos para una mejor toma de decisiones.

Respecto de MasAgro, Govaerts comentó que “el Programa inició en 2010 y sigue teniendo resultados en 2017; por ejemplo, El Colegio de México midió que en la zona de temporal del Estado de México pasamos de 2.88 toneladas a 3.44 toneladas por hectárea, y así tenemos datos de varios estados”.

“El programa y la metodología de MasAgro fueron desarrollados aquí en México con actores mexicanos, pero, tomando en cuenta las lecciones aprendidas, revisamos éxitos y fracasos a nivel internacional”, comenta, y agrega un dato clave: “Es muy importante, esta metodología constantemente se va revisando, tanto en su operación como en sus conceptos y formas vinculadas a la política pública”.

Mencionó que “en 2017 lo que es importante resaltar es que pudimos escalar el esfuerzo a más productores gracias a la intervención de PROAGRO Productivo, con el cual —a través del acompañamiento técnico— pudimos trazar, y tenemos en una base de datos más de 30,000 predios que están monitoreándose desde la siembra hasta la cosecha. Y, obviamente, esto tiene mucho potencial porque con datos, con información, la gente puede tomar mejores decisiones. Eso es lo que al final queremos, que el pequeño productor tenga acceso a la información”.

“La ciencia, tecnología, innovación y creatividad aplicadas a la agricultura son retos esenciales, y el compromiso central detrás de ellos es estimular la inversión para poder avanzar”.

“México resguarda no sólo biodiversidad en maíz y trigo, también conocimiento para el resto del mundo, y en este sentido, un reconocimiento para los productores del Sistema Producto Maíz, ya que pueden sentirse orgullosos de lo que su labor de transferencia ha aportado”.

En un auténtico llamado a dar un paso inteligente hacia el desarrollo productivo, eliminar brechas en las sociedades y alcanzar plena seguridad alimentaria, Govaerts planteó que “si aprovechamos esta metodología e integramos toda la política pública y las inversiones, más los sistemas agroalimentarios productivos que generan el grano nutritivo para la población, que al mismo tiempo resguarda el medio ambiente, sí podemos erradicar la desigualdad y mucha pobreza. Básicamente, aquí hay un gran potencial”.

“La agricultura es el sector del futuro”, sintetiza Govaerts. No sólo una reflexión retórica, sino un compromiso que nos involucra a todos.

Categorías
Noticias

Se usan cultivos alternativos para mejorar el suelo en la plataforma de Villa Corzo, Chiapas

Los cultivos alternativos tienen la ventaja de producir grano o forraje y mejorar el suelo.
Por: Rubén de la Piedra Constantino.
6 de diciembre de 2017.

Villa Corzo, Chis.- Hoy en día, el productor enfrenta una situación de insumos con precios cada vez más elevados y, en algunos casos, la caída de los precios de los productos agrícolas. La mayoría de los productores en la región Frailesca, en Chiapas, son pequeños y medianos agricultores de muy bajos recursos económicos y con acceso limitado a créditos. La combinación de estas limitantes con la amenaza de fenómenos climáticos hace que las unidades productivas del pequeño agricultor sean de alto riesgo económico e improductivas. Ante esta situación, es necesario buscar alternativas que ayuden al productor a disminuir esos riesgos, razón por la cual se estableció el ensayo “Validación de sistemas de producción alternativos”, que tiene como objetivo validar cultivos que se adapten a las condiciones agroclimáticas de la Frailesca con el propósito de generar una entrada de recursos económicos para el productor, o bien como una alternativa para mejorar la fertilidad del suelo o como uso de forraje para su ganado.

Siguiendo las prácticas MasAgro, se establecen cultivos alternativos que tienen la ventaja de producir grano o forraje y mejorar el suelo. Se pueden sembrar bajo el sistema de relevo al maíz, aprovechando la humedad residual del ciclo de lluvias. Además, estos cultivos no ocasionan altos costos en insumos ni son exigentes en cuanto a nutrientes. Teniendo en cuenta que muchos de los cultivos son importados de otros estados y que se encuentran en centros comerciales a un costo elevado, la idea es que, al sembrar estos cultivos, el productor genere un alimento nutritivo de alta calidad y además pueda mejorar sus ingresos. Los cultivos alternativos establecidos fueron: frijol (Phaseolus vulgaris), frijol Vigna o Caupí (Vigna unguiculata), dolichos (Dolichos lablab), clitoria (Clitoria ternatea), canavalia (Canavalia ensiformis), girasol (Helianthus annuus), ajonjolí (Sesamum indicum L.), chía (Salvia hispánica L), amaranto (Amaranthus sp.) y okra (Abelmoschus esculentus).

Cuadro 1. Rendimiento (kg/ha) de los cultivos alternativos en la plataforma de Villa Corzo, ciclo PV 2016.

Los rendimientos obtenidos por cada uno de los cultivos validados (cuadro 1) muestran que el cultivo de frijol de la variedad Negro Grijalva fue el que obtuvo el mejor rendimiento, en comparación con los otros cultivos, con 1174 kg/ha. Otros cultivos que también tuvieron buen rendimiento fueron el girasol, con 638 kg/ha; el amaranto, con 586 kg/ha, y el frijol Vigna, con 551 kg/ha. Los rendimientos de esos cultivos fueron buenos, considerando que las condiciones agroclimáticas bajo las cuales se desarrollaron no fueron las más adecuadas. Cultivos como la clitoria, la okra y la chía no tuvieron buenos rendimientos, ya que sólo obtuvieron 77, 172 y 391 kg/ha, respectivamente. Los resultados obtenidos con los diferentes cultivos validados permiten visualizar que varios de ellos pueden ser una opción viable de producción bajo el sistema de manejo en relevo al cultivo de maíz, como es el caso del frijol, el girasol, el amaranto y el frijol Caupí.

Categorías
Noticias

A través del proyecto de Innovación Agrícola Sustentable Chihuahua se instalará una nueva plataforma de investigación

Se organizó una reunión con productores y otros actores locales en el CBTA 170 en Guachochi, Chihuahua, para planear la instalación de una nueva plataforma de investigación en el municipio. La reunión tuvo por objetivo conocer el sistema de producción local y las principales problemáticas que preocupan los productores de la zona. Cabe señalar que cuando se inicia una plataforma de investigación es importante tener una reunión para asegurar que la investigación responda a una problemática local y para fomentar la vinculación entre productores e investigadores.

En general, el sistema de producción en la región es muy diverso, por lo que se puede encontrar desde pequeños productores que siembran una hectárea de maíz para autoconsumo hasta productores medianos que producen principalmente maíz y avena para forraje. La mayoría de los productores en el sector son los pequeños que producen principalmente maíz criollo, seguido por avena, frijol, papa y triticale para autoconsumo y forraje. Hay una gran diversidad en el maíz criollo, y a cada tipo de maíz le dan un uso distinto. La ganadería es también muy importante en la zona, por lo que los productores usan forrajes y grano para alimentar a sus vacas, cabras, borregos, puercos y gallinas.

Con relación al sistema productivo, la preparación del terreno se hace de manera manual, con tiro de animal, con tractor de dos ruedas o con tractor de cuatro ruedas. El maíz y frijol se siembran en camas, en cambio, la avena y el triticale se siembran al voleo. Los pequeños productores siembran a mano, mientras que los productores medianos usan maquinaria. La época de siembra es al inicio de las lluvias, en general en el mes de abril. La fertilización de los cultivos se realiza con urea y DAP en una proporción de, más o menos, 100 kg de urea y 50 kg de DAP por hectárea. No es común hacer análisis del suelo, por lo que se desconoce la cantidad de fertilizante necesario y cuáles nutrientes son limitantes.

Los principales problemas de malezas son quelite y girasol, que la mayoría controla con labores culturales o desyerbe manual, y a veces con herbicidas postemergentes como 2,4-D amina. Existe presencia de plagas como gusano cogollero y elotero, pero la mayoría de los productores no usa insecticidas, ya que, debido al clima templado de la zona, no causan graves daños. La cosecha de los cultivos se hace de manera manual desde mediados de octubre hasta mediados de noviembre. Primero, los productores remueven la parte de la planta de maíz arriba de la mazorca y lo retiran del terreno para uso como forraje. Posteriormente, las mazorcas se dejan secar un tiempo más antes de cosechar. Finalmente, se hace la cosecha y se retira el resto de la planta o se deja para pastoreo. El rendimiento promedio es de 2 toneladas de maíz y 130 pacas de avena.

La principal problemática que mencionaron los productores fue la baja fertilidad del suelo; los suelos en el área son delgados y están muy degradados. El forraje tiene más importancia que el grano, lo que dificulta que los productores dejen residuos de cosecha en el terreno para mejorar la calidad del suelo. Además, las lluvias se han vuelto cada vez más irregulares y el suelo no retiene suficiente humedad, lo que provoca que los productores no obtengan los mismos rendimientos que antes. Como ya se mencionó, la falta de análisis de suelos impide que la fertilización sea la adecuada. Por último, se reporta una mayor incidencia de plagas a causa del cambio climático.

Debido a la falta de asistencia técnica en la zona, se percibe la necesidad de mejorar el conocimiento de manejo de los cultivos en general; dentro de los aspectos en los que se requiere capacitación se pueden mencionar el adecuado control de malezas, la distribución de semillas en la siembra, la selección de semillas y la calidad de semilla, entre otros.

Los productores también mencionaron como una limitante los altos costos por mano de obra y diésel, y consideran que existe la necesidad de introducir cultivos de invierno para un mejor aprovechamiento de los terrenos. Dada la gran variedad que existe de maíces criollos, no hay mucha demanda para la introducción de nuevos materiales para consumo humano; sin embargo, para la producción de forraje es necesario introducir materiales más productivos de maíz y avena.

Después de la reunión con los productores, se tuvo una reunión con personal del CBTA 170 y técnicos colaboradores locales para decidir en qué enfocar la investigación en la plataforma para mejorar los problemas de los productores. A partir de ésta, se decidió que la Agricultura de Conservación (AC) tiene potencial en el área para mejorar la calidad de los suelos y bajar los costos de producción; sin embargo, la demanda de forraje puede ser una limitante. En la AC es necesario dejar suficientes residuos en el suelo para mantener la fertilidad. Por lo que se decidió que en la plataforma se evaluarán tratamientos que combinen la producción de maíz grano con la producción de forraje para crear una alternativa para producir rastrojo. Además, se evaluará si la producción de maíz grano en camas permanentes en rotación con avena da mejor rendimiento y rentabilidad que la producción de maíz bajo labranza tradicional en monocultivo. También se evaluarán tratamientos con camas permanentes incorporando cultivos de invierno como triticale y veza para producción de forraje. En el área de validación se evaluarán diferentes variedades de maíz forrajero y avena.

La plataforma se establecerá en el ciclo primavera-verano 2018 en terrenos del CBTA 170 que ya se manejan bajo Agricultura de Conservación. Los primeros datos de rendimiento y rentabilidad se esperan en 2019.