Categorías
Noticias

Director general del CIMMYT reafirma compromiso con Zambia

Bram Govaerts en recorrido de campo con el jefe de ciencias de Zamseed (Foto: Katebe Mapipo/CIMMYT)
Bram Govaerts en recorrido de campo con el jefe de ciencias de Zamseed (Foto: Katebe Mapipo/CIMMYT)

Honrando un legado de desarrollo innovador en Zambia, y esperando alcanzar las metas nacionales de seguridad alimentaria, Bram Govaerts, director general del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), junto Lindiwe Sibanda, presidenta del Consejo Directivo del CGIAR, visitaron las instalaciones y se reunieron con colaboradores del AID-I Rapid Delivery Hub en el sur de África, el pasado 2 y 3 de junio.

“El trabajo del CIMMYT en Zambia y la región está orientado a ayudar a los gobiernos nacionales a desarrollar resiliencia al cambio climático, diversificar los sistemas agrícolas basados en el maíz y mejorar la productividad y la producción para reducir el hambre y la pobreza”, dijo Govaerts.

El AID-I Rapid Delivery Hub del sur de África tiene como objetivo brindar apoyo crítico a más de 3 millones de hogares agrícolas en Malaui, Tanzania y Zambia a través de intervenciones específicas para el escalamiento de sistemas de semillas impulsado por la demanda, la mejora de la salud del suelo y la eficiencia en el uso de fertilizantes, así como la entrega rápida de servicios críticos de asesoramiento agrícola en las comunidades rurales.

La investigación y la innovación del CIMMYT respaldan la meta a mediano plazo de Zambia de lograr una «transformación socioeconómica para mejorar los medios de vida» y su visión hacia 2030 de convertirse en «una nación próspera de ingresos medios para 2030».

Govaerts y Sibanda recorrieron las instalaciones de Afriseed en Lusaka y sus pruebas de campo para el cultivo de trigo en Ngwerere. También asistieron a una demostración de campo de las bolsas de almacenamiento mejorado de cultivos de la Universidad de Pardue y organizaciones asociadas en una localidad cercana al distrito de Chongwe. Esta actividad fue organizada por Catholic Relief Services, un socio local que promueve tecnologías poscosecha de bajo costo para agricultores de pequeña escala en Zambia.

La delegación también visitó al socio Zamseed, una empresa que comercializa y lanza semillas de maíz tolerantes al gusano cogollero desarrolladas por el CIMMYT.

El AID-I Rapid Delivery Hub del Sur de África ha permitido la liberación de casi 10 mil toneladas métricas de semillas certificadas de maíz y leguminosas que han sido cosechadas por empresas semilleras y organizaciones comunitarias de Zambia, beneficiando directamente a un millón de agricultores de semisubsistencia.

En este sentido, Govaerts reconoció el compromiso de Zambia para crear un sistema de semillas transparente: “Gracias a este entorno político propicio, Zambia es un centro importante en África subsahariana para la producción y exportación de semillas de maíz híbrido en África”.

Además del AID-I Rapid Delivery Hub del sur de África, el CIMMYT y el Instituto de Investigación Agrícola de Zambia han estado colaborando durante más de dos décadas junto con socios públicos y privados en ese país a través de diferentes inversiones diseñadas para crear intervenciones sostenibles que fortalezcan los sistemas alimentarios y lleguen directamente a los agricultores de pequeña escala.

Categorías
Noticias

Fortalecimiento de alianzas con el gobierno y el sector privado en Malawi

Científicos del CIMMYT y socios del sector privado fotografiados durante una cena organizada por el director general del CIMMT, Bram Govaerts, en Lilongwe, Malawi. (Foto: Tawanda Hove/CIMMYT)

El Objetivo 17 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas llama a “Fortalecer los medios de implementación y revitalizar la alianza mundial para el desarrollo sostenible”. El Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) respondió a este llamado a la acción al organizar recientemente una cena colaborativa para fortalecer los lazos entre el Centro, el sector privado y los socios gubernamentales en Malawi.

Organizada por el director general del CIMMYT, Bram Govaerts, la cena siguió a la visita del Enviado Especial de EE. UU. para la Seguridad Alimentaria Mundial Cary Fowler, Dina Esposito, Asistente del Administrador, Oficina de Resiliencia y Seguridad Alimentaria de USAID y otro personal de USAID para discutir y presenciar el nuevo Programa Acelerado Iniciativa de Innovación para la Entrega (AID-I) en acción.

“Los desafíos de hoy no requieren un enfoque de un solo sector, sino uno pluralista en el que los socios de los sectores público y privado acuerden trabajar de la mano con organizaciones de ciencia para el impacto como el CIMMYT y otros centros de CGIAR”, dijo Govaerts en su discurso de apertura en el evento. “Estoy muy agradecido por su apoyo y su presencia hoy es un testimonio de nuestra armoniosa solidaridad y espíritu de colaboración para abordar la seguridad alimentaria y nutricional”.

Govaerts interactúa con representantes del gobierno y de la agroindustria en una cena organizada en Lilongwe, Malawi. (Foto: Tawanda Hove/CIMMYT)

Govaerts interactúa con representantes del gobierno y de la agroindustria en una cena organizada en Lilongwe, Malawi. (Foto: Tawanda Hove/CIMMYT)

A la reunión asistieron actores de la industria de semillas, distribuidores de insumos agrícolas, procesadores de alimentos y representantes gubernamentales, incluida la Directora de Servicios de Investigación Agrícola, Grace Kaudzu, quien expresó su agradecimiento por la reunión.

“Como gobierno, nuestro papel es crear un entorno propicio para que el sector privado prospere y los socios de desarrollo progresivo siempre son bienvenidos. Tales reuniones nos permiten escuchar las necesidades de colegas y socios de otros sectores para crear este entorno”, dijo.

Malawi ha establecido una hoja de ruta ambiciosa donde las exportaciones de leguminosas y la producción de maíz se incrementarán significativamente. El proyecto AID-I encaja con esta hoja de ruta ya que se enfoca en fortalecer los sistemas de semillas de maíz y leguminosas y abordar las limitaciones sistémicas en ambas cadenas de valor.

La cena facilitó aún más que los actores del sector privado se reunieran con varios especialistas del CIMMYT, desde expertos en sistemas de semillas, científicos del suelo, fitomejoradores y fisiólogos de plantas. Según Peter Setimela, especialista en sistemas de semillas del CIMMYT, estas reuniones son fundamentales, ya que permiten que una diversidad de socios sepa lo que el otro tiene para ofrecer.

“El CIMMYT tiene mucha experiencia que estos socios del sector privado pueden aprovechar”, dijo Setimela.

El proyecto AID-I busca ampliar las innovaciones, tecnologías y modelos comerciales existentes y de alto potencial en lugar de iniciar otros nuevos. Esto solo tiene sentido considerando que el período de implementación es de solo dos años y la ampliación de las innovaciones existentes brinda mayores perspectivas de éxito.

El representante regional del CIMMYT, Moses Siambi, calificó el evento como un éxito y citó la gran participación de los socios.

“La efectividad de nuestras intervenciones depende de la solidez de las relaciones que tenemos con nuestros socios. Una asistencia tan masiva es indicativa de las relaciones cordiales entre el CIMMYT y el sector privado en conjunto con el gobierno”, dijo Siambi.

Govaerts cerró el evento destacando que al aprovechar el potencial del poder de convocatoria, el futuro es brillante independientemente de la realidad del cambio climático y los conflictos geopolíticos.

Categorías
Reportajes

Una historia de éxito de los sistemas de semillas

Stewards Global, comercializado como Afriseed, es una historia de éxito de intervención en los sistemas de semillas de Zambia. Gracias al apoyo del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) y otros socios como la Agencia de EE. UU. para el Desarrollo Internacional (USAID) y la Alianza para una Revolución Verde en África (AGRA), Afriseed está transformando los medios de vida de los agricultores rurales a través de suministro de semilla de maíz tolerante a la sequía.

Lo que comenzó como una empresa emergente en 2007 ha crecido desde entonces hasta convertirse en una de las empresas líderes en la industria de semillas de Zambia. “Comencé esta empresa con un equipo de tres personas. No teníamos mucho, pero teníamos una visión convincente”, dice la fundadora Stephanie Angomwile. «Inicialmente, estábamos multiplicando y distribuyendo semillas de leguminosas en el mercado, ya que habíamos observado el déficit donde era muy difícil para cualquier agricultor serio obtener semillas mejoradas y de alto rendimiento».

“Después de haber establecido el negocio, tuvimos la suerte de obtener el apoyo de AGRA para asegurar las instalaciones industriales adecuadas donde podíamos concentrar nuestras operaciones y servir al mercado de Zambia”, explica. «Usando maquinaria básica, pudimos producir 100 toneladas métricas de semillas por temporada, lo que fue bastante impresionante considerando lo rudimentario que era nuestro equipo».

En este punto, USAID aceptó su visión y proporcionó a Afriseed una planta de procesamiento que podía manejar, clasificar, tratar y empacar semillas tanto de leguminosas como de maíz. Después, la empresa pasó a trabajar con semillas de maíz, basándose en la observación de que la mayoría de los agricultores obtenían rendimientos inferiores al potencial genético de las variedades existentes.

“Para hacerlo, estaba bastante claro que necesitábamos una institución que pudiera ayudarnos a entrar en la industria de semillas de maíz dominada por grandes empresas multinacionales de semillas”, explica Angomwile. “Esto nos llevó a asociarnos con el CIMMYT, que es una asociación que aún existe hoy y nos ha permitido acelerar nuestra estrategia de penetración en el mercado al proporcionarnos genética tolerante a la sequía de alto rendimiento que está creciendo en popularidad entre los agricultores”.

Stephanie Angomwile da un recorrido a representantes de la USAID y el CIMMYT durante una visita a Afriseed. (Foto: Tawanda Hove/CIMMYT)

El impacto del apoyo del CIMMYT

Desde 2017, el CIMMYT ha estado trabajando con Afriseed para ayudar a los pequeños agricultores a acceder a variedades nuevas y mejoradas que sean tolerantes a la sequía y puedan soportar las variaciones climáticas estacionales inducidas por el cambio climático. “Como CIMMYT, nuestra función no es solo producir material genético mejorado que los agricultores puedan aprovechar, sino también apoyar el desarrollo empresarial del sector privado a través de programas intensivos de desarrollo de capacidades que posicionen a dichas entidades para que sean sostenibles y sobresalgan en la ausencia de apoyo a proyectos.”, explica Hambulo Ngoma, economista agrícola que trabaja con el CIMMYT. La organización ha proporcionado a Afriseed dos variedades de alto rendimiento hasta el momento: AFS 635 y AFS 638. Además, el CIMMYT ha ayudado a Afriseed a estimular la demanda en el mercado de pequeños agricultores facilitando el establecimiento de parcelas de demostración y diseñando estrategias específicas de comercialización de semillas.

Durante la reciente visita del director general del CIMMYT, Bram Govaerts, a Zambia, Ngoma destacó que la organización es consciente de que las pequeñas y medianas empresas pueden verse limitadas con respecto a los presupuestos de mercadeo y las inversiones en desarrollo de mercado. “Como tal, cuando estamos convencidos de que existe un caso comercial y una oportunidad para una transformación de la seguridad alimentaria, generalmente apoyamos a entidades prometedoras como Afriseed con conocimiento y recursos para estimular la demanda”, dijo. «Esto es de suma importancia ya que los agricultores que cultivan semillas viejas y recicladas de variedades antiguas necesitan hacer la transición a variedades nuevas y mejoradas».

Govaerts dijo: «Estamos felices de poder contribuir al éxito de Afriseed a nuestra pequeña manera y esperamos que nuestra asociación lo lleve al siguiente nivel».

Desde entonces, Afriseed ha crecido y ahora cuenta con casi 200 trabajadores: 90 empleados permanentes y 110 trabajadores ocasionales durante la temporada alta. La producción se ha disparado a un exceso de 10.000 toneladas métricas por temporada y hay una creciente base de clientes que se extiende por todas las regiones del país. Angomwile está muy agradecida de haber tenido un socio como el CIMMYT, que facilitó la afiliación de Afriseed al Consorcio Internacional de Maíz (IMC), un organismo global que brinda acceso a un acervo genético ampliado que brinda exposición a nuevos avances genéticos. “Ser miembro de IMC definitivamente es una ventaja para nosotros como entidad porque el mercado de suministro de semillas es altamente competitivo”, explica. “Por lo tanto, ahora podemos darnos cuenta rápidamente de los nuevos materiales genéticos disponibles y pedirle a nuestro equipo de investigación y desarrollo, establecido gracias al inmenso apoyo del CIMMYT, que desarrolle nuevas variedades para nuestro mercado objetivo”.

A través de una serie de visitas de intercambio y capacitaciones, el CIMMYT ha asesorado al equipo de investigación y desarrollo que ahora está en condiciones de obtener sus propias variedades sin apoyo externo. “La cantidad de agricultores en áreas de alto potencial que se encuentran en lugares remotos y que aún cultivan semillas recicladas sigue siendo bastante grande”, dice Peter Setimela, un especialista en sistemas de semillas que formó parte del equipo de tutoría. “Necesitamos brindar continuamente un amplio apoyo a entidades como Afriseed para que la brecha de deficiencia de calidad de la semilla pueda reducirse en gran medida”.

Como las lluvias han sido abundantes durante esta temporada 2022/23, existe una gran expectativa de que los agricultores que han cultivado semillas de proveedores de semillas de renombre como Afriseed estén listos para una cosecha excelente.

Foto de portada: Personal de Afriseed preparando semillas de leguminosas para su procesamiento en Zambia. (Foto: Agricomms)

Categorías
Noticias

Presentación de resultados de la Red Colaborativa de Evaluación 2019

Conscientes de que el sector agrícola es prioritario para México, la Red de Semilleros MasAgro no aminora el paso. Representantes de distintas compañías semilleras mexicanas, sector agroindustrial, instituciones públicas de investigación y del Programa Global de Maíz del CIMMYT se reunieron virtualmente el pasado 30 de junio para presentar los resultados de la Red de Evaluación 2019, en donde lograron sembrarse más de 130 localidades en México y 18 en América Central.

Bajo la coordinación del CIMMYT, la red colaborativa de más de 70 empresas semilleras mexicanas, instituciones públicas nacionales y colaboradores de América Central, evalúan en diferentes mega ambientes de México y del trópico centroamericano, variedades e híbridos de maíz de alto rendimiento, resistentes a enfermedades y tolerantes a los efectos del ambiente.

El desarrollo de semillas mejoradas de este grano es prioritario para el incremento de la producción, mismo que se logra principalmente por la selección de híbridos competitivos, con semillas de alta calidad y el manejo agronómico adecuado que permita la expresión de su potencial genético. Es de resaltar que los colaboradores de la red cubren los costos de los ensayos que conducen y se benefician de la información que se genera en todas las localidades.

“En México, se cultiva semilla de maíz mejorado en 4.4 millones de hectáreas del total de 7.6 millones de hectáreas destinadas al maíz. Como resultado de las iniciativas públicas y privadas, el Consorcio ocupa el 21% del valor en dinero del mercado de semilla mejorada”, comentó Arturo Silva, líder de Sistemas de Semillas de Maíz para América Latina.

Los datos colectados por la red permitieron al Comité de Avance de Productos seleccionar cinco nuevos híbridos del CIMMYT que pasan a Sistemas de Semillas para incrementar la semilla básica y hacer investigación de la producción de sus semillas. Sin embargo, los participantes de la red disponen también de los datos y pueden hacer su propia selección de híbridos con adaptación específica a ambientes de su interés comercial, así mismo, los colaboradores que incluyeron sus propios productos tienen información de su competitividad versus testigos comerciales y los híbridos del CIMMYT.

Por otro lado, la información de 24 localidades de ensayos agronómicos, en donde se evalúan híbridos comerciales bajo distintas densidades y fechas de siembra, es clave para la toma de decisiones sobre la continuidad en el mercado, recomendaciones de manejo y/o zonas de producción de híbridos del CIMMYT y propios de las empresas participantes.

Entre los éxitos del programa MasAgro, la Red Colaborativa de Evaluación es uno de los más destacados, ya que logró coordinar empresas con tamaños y experiencia en la conducción de ensayos muy diferentes, pero con el mismo propósito de generar datos confiables que puedan ser de utilidad para todos, poniendo a un lado que son competidores en el mercado de semilla y trabajando como aliados en la obtención de datos de excelente calidad.

Ahora que se presentan nuevos retos, en el CIMMYT tenemos la certeza que, con base en lo aprendido en estos años, saldremos fortalecidos y esta red vital tendrá continuidad para la sostenibilidad de empresas mexicanas y del resto de América Latina.

Categorías
Reportajes

Abriendo Camino: Aparna Das lidera la investigación de maíz eficiente y basada en la demanda

Obtener una buena cosecha de maíz, o lo suficiente para alimentar a la familia, siempre ha sido un desafío para los pequeños productores de maíz en los países en desarrollo. Demasiada o muy poca lluvia, olas de calor, plagas o enfermedades, rara vez producen más de una o dos toneladas de maíz por hectárea, y a veces se pierde todo. El cambio climático, las plagas invasoras, como el gusano cogollero o la necrosis letal del maíz, ponen en peligro aún más los medios de vida de los agricultores de maíz y podrían desencadenar una grave crisis alimentaria.

Es por eso que el sustento de los agricultores de maíz depende de las semillas buenas: semillas que sean resistentes al clima, a plagas y enfermedades, de alto rendimiento en condiciones locales, y a menudo con insumos mínimos.

«Aquí es donde la investigación en el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) juega un papel fundamental en este desafío de la seguridad alimentaria.  Se deben desarrollar las variedades que los agricultores desean, que las empresas asociadas de semillas están dispuestas a producir de una manera rentable y eficiente», explica Aparna Das, quien se unió al Programa Global de Maíz del CIMMYT en agosto de 2018 como gerente técnica del programa.

»Mi trabajo consiste en guiar al equipo de Mejoramiento y Sistemas de Semillas para que nuestra investigación esté más orientada al cliente y al producto, que haya una mejor coordinación y monitoreo, que se alinee con los recursos y habilidades disponibles dentro del CIMMYT y con nuestro numerosos socios públicos y privados», explica.

El impacto agrícola en la relación calidad-precio

Recientemente, Das coordinó una serie de talleres colaborativos de creación de perfiles de productos con socios del CIMMYT. Integrando las prioridades de los sistemas nacionales de investigación agrícola y las empresas asociadas de semillas, este ejercicio revisó y redefinió los rasgos de maíz y los atributos que la investigación debería centrar en los próximos años. Después de esta consulta, los socios no solo toman el germoplasma del CIMMYT basados en los datos de prueba, sino que pueden verificar si se ajusta a su propio perfil, para asegurarse de que los rasgos que desean estén presentes. Esto hace que el mejoramiento sea mucho más específico y eficiente.

«El perfil de este producto ya ha influido en nuestra investigación. Por ejemplo, todos los socios mencionaron hojas más resistentes como un rasgo «imprescindible» porque sufren menos ataques de insectos y deterioro del grano. “Aunque se consideró como un rasgo básico, los mejoradores no lo consideraron sistemáticamente durante la selección de la línea de maíz y el avance del producto. Ahora es algo que se considera», señala.

«Nuestro impacto no debe limitarse al número de variedades lanzadas o de artículos publicados, sino también al número de variedades adoptadas y escaladas por los socios y los agricultores», subraya Das.

Los especialistas en mejoramiento y sistemas de semillas han trabajado juntos para estimar y registrar los costos de la entrega de productos. Cada equipo responsable de un perfil de producto ahora puede, a través de la simulación, probar diferentes soluciones y ver qué costos pueden reducirse o aumentarse para desarrollar el híbrido.

Das disfruta este tipo de colaboración. «Manejar el cambio de comportamiento es una parte clave de mi rol, poder trabajar con diferentes equipos y culturas es algo que hace que mi trabajo sea interesante», agrega Das.

Plates of boiled and roasted maize are displayed for tasting during a farmer participatory varietal selection exercise in Embu, Kenya, in August 2019. Flavors of varieties are very distinct and could explain why some old varieties are still preferably grown by farmers. (Photo: S. Palmas/CIMMYT)
Platos de maíz hervido y tostado se colocan para ser tostados durante un ejercicio de selección en Embu, Kenia, en agosto de 2019. Los sabores de las variedades eran distintos y se podía entender por qué algunas variedades viejas siguen siento preferidas por los agricultores. (Foto: S. Palmas/CIMMYT)

Una mujer creativa en un mundo de hombres

El fitomejoramiento es un mundo dominado por los hombres, pero Das esta acostumbrada a encajar en las minorías. Originaria de Bengala Occidental, creció en Ludhiana, India. Aprendió genética y fitomejoramiento en la Universidad Agrícola de Punjab (PAU), Ludhiana. Descubrir el nuevo campo del mejoramiento molecular en sus inicios, hace veinticinco años, fue un desafío emocionante.

En PAU, Das realizó investigaciones de mejoramiento de cultivos, primero en trigo y papa y, posteriormente, en genética de arroz. Durante ese tiempo, fue galardonada por el Departamento de Ciencia y Tecnología (DST) en el marco del «Programa de Jóvenes Científicos» por su trabajo en genética del arroz basmati, con el objetivo de crear variedades basmati más cortas y productivas, sin perder el aroma.

Posteriormente, se unió al Instituto Internacional de Investigación del Arroz (IRRI, por sus siglas en inglés) para trabajar en el arroz dorado para desarrollar variedades ricas en provitamina A a través de la ingeniería genética.

’Ser mujer en el area del fitomejoramiento, especialmente como mejoradora, no es tan común. No se espera que las mujeres realicen trabajos de fitomejoramiento en el campo, lejos del laboratorio y las oficinas. Pero yo no retrocedí. Hice mi trabajo de campo en los arrozales por mi cuenta y bajo temperaturas que iban hasta los 40 grados. Creo que las mujeres aportan un nivel de precisión que es muy importante en el mejoramiento».

Uniendo la experiencia de los sectores públicos y privados

Después de diez años de investigación pública, se mudó al sector privado de semillas para aprender cómo las compañías de semillas integran las necesidades de los agricultores a su flujo de investigación y después canalizan esta investigación para hacerla llegar a millones de agricultores. «Una lección importante que aprendí de las corporaciones es la relación calidad-precio en cada etapa de su investigación y que la investigación de mercado es fundamental para comprender realmente las necesidades de los agricultores y un mejoramiento orientado», señala Das.

Después de una década en el sector privado, Das estaba ansiosa por seguir adelante y usar su experiencia en el sector público. Fue entonces cuando se unió al CIMMYT. «La oportunidad de ser gerente del programa técnico llego en el mejor momento.  Conocía las fortalezas del CGIAR, tener científicos altamente capacitados y el gran alcance potencial de la investigación.  Sabía dónde podría mejorarse la investigación de cultivos, al convertir la investigación básica en una investigación «basada en la demanda».

«Hace una década, desde que trabajaba en IRRI, me di cuenta de que las cosas han avanzado en el CGIAR. Los sistemas de semillas, la elaboración de perfiles de productos y la investigación de la cadena de valor ahora están completamente integrados en el Programa Global de Maíz. Es un momento clave para estar aquí en el CIMMYT.  Con la reforma del CGIAR, la emergencia climática y las plagas y enfermedades emergentes, tenemos que ser aún más creativos para continuar generando un mayor impacto», concluye Das.

Categorías
Videos

Científicos dirigen sus esfuerzos para investigar trigo más resiliente al clima

https://youtu.be/GcNnxXTugpo

 

Este mes, los ojos del mundo están puestos en los líderes mundiales reunidos en la COP25 en Madrid para negociar acciones colectivas que frenen los efectos devastadores del cambio climático.

Según la ONU, el mundo se dirige hacia un aumento de la temperatura global de 3.2 grados Celsius sobre los niveles preindustriales, lo que lleva a una serie de impactos climáticos destructivos, incluidos entornos más cálidos y secos, y eventos climáticos más extremos. En estas condiciones, los cultivos alimentarios básicos del mundo se ven amenazados.

Un nuevo video destaca el trabajo del Consorcio para el Mejoramiento del Trigo resistente al Calor y la Sequía (HeDWIC, en inglés), una red global de investigación y desarrollo de capacidades bajo la Iniciativa del Trigo, que aprovecha las últimas tecnologías en fisiología, genética y mejoramiento de cultivos para ayudar a crear nuevas variedades de trigo resistentes al clima. Con la ayuda y apoyo de colaboradores de todo el mundo, HeDWIC lleva la investigación del trigo de lo teórico a lo práctico al incorporar la mejor ciencia en los escenarios de mejoramiento de la vida real.